Juan 1:42 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Luego lo llevó a Jesús, quien, mirándolo fijamente, le dijo: ―Tú eres Simón, hijo de Juan. Serás llamado Cefas (es decir, Pedro). Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y le trajo a Jesús. Y mirándole Jesús, dijo: Tú eres Simón, hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas (que quiere decir, Pedro). Biblia Nueva Traducción Viviente Luego Andrés llevó a Simón, para que conociera a Jesús. Jesús miró fijamente a Simón y le dijo: «Tu nombre es Simón hijo de Juan, pero te llamarás Cefas» (que significa «Pedro»). Biblia Católica (Latinoamericana) Y se lo presentó a Jesús. Jesús miró fijamente a Simón y le dijo: 'Tú eres Simón, hijo de Juan, pero te llamarás Kefas' (que quiere decir Piedra). La Biblia Textual 3a Edicion Lo llevó a Jesús. Mirándolo fijamente, Jesús dijo: Tú eres Simón, el hijo de Juan,° tú serás llamado Cefas (que significa Pedro).° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y lo llevó a presentárselo a Jesús. Jesús, fijando en él su mirada, le dijo: 'Tú eres Simón, el hijo de Juan; pues tú te llamarás Cefas, que significa Pedro'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y le trajo a Jesús. Y mirándole Jesús, dijo: Tú eres Simón hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas (que quiere decir, piedra). |
Estos son los nombres de los doce apóstoles: primero Simón, llamado Pedro, y su hermano Andrés; Jacobo y su hermano Juan, hijos de Zebedeo;
Al ver esto, Simón Pedro cayó de rodillas delante de Jesús y le dijo: ―¡Apártate de mí, Señor; soy un pecador!
Simón (a quien llamó Pedro), su hermano Andrés, Jacobo, Juan, Felipe, Bartolomé,
»No me refiero a todos vosotros; yo sé a quiénes he escogido. Pero esto es para que se cumpla la Escritura: “El que comparte el pan conmigo me ha puesto la zancadilla”.
Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (al que apodaban el Gemelo), Natanael, el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo, y otros dos discípulos.
Me refiero a que unos dicen: «Yo sigo a Pablo»; otros afirman: «Yo, a Apolos»; otros: «Yo, a Cefas»; y otros: «Yo, a Cristo».
ya sea Pablo, o Apolos, o Cefas, o el universo, o la vida, o la muerte, o lo presente o lo por venir; todo es vuestro,
¿No tenemos derecho a viajar acompañados por una esposa creyente, como hacen los demás apóstoles y Cefas y los hermanos del Señor?
Después de tres años, subí a Jerusalén para visitar a Pedro, y me quedé con él quince días.
Pues bien, cuando Pedro fue a Antioquía, le eché en cara su comportamiento condenable.
En efecto, Jacobo, Pedro y Juan, que eran considerados columnas, al reconocer la gracia que yo había recibido, nos dieron la mano a Bernabé y a mí en señal de compañerismo, de modo que nosotros fuéramos a los gentiles y ellos a los judíos.