Abandonaron el templo del Señor, Dios de sus antepasados, y adoraron las imágenes de Aserá y de los ídolos. Debido a este pecado, la ira de Dios cayó sobre Judá y Jerusalén.
Josué 22:20 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 ¿No es verdad que cuando Acán hijo de Zera pecó al hurtar de lo que estaba destinado a la destrucción, la ira de Dios se descargó sobre toda la comunidad de Israel? Recordad que Acán no fue el único que murió por su pecado. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 ¿No cometió Acán hijo de Zera prevaricación en el anatema, y vino ira sobre toda la congregación de Israel? Y aquel hombre no pereció solo en su iniquidad. Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Acaso no cayó el enojo divino sobre toda la comunidad de Israel cuando Acán, un miembro del clan de Zera, pecó al robar las cosas que habían sido apartadas para el Señor? Él no fue el único que murió a causa de su pecado. Biblia Católica (Latinoamericana) Acuérdense de la infidelidad de Acán, hijo de Zerá, a propósito del anatema: la cólera de Yavé castigó a toda la comunidad de Israel, y no murió solamente él por culpa de su crimen'. La Biblia Textual 3a Edicion ¿No cometió Acán ben Zera una prevaricación con el anatema, y vino la ira sobre toda la comunidad de Israel? Y aquel hombre no fue el único que falleció por su iniquidad.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿No fue Acán, hijo de Zéraj, el que prevaricó violando el anatema? Sin embargo, la cólera divina alcanzó a toda la comunidad de Israel ¡No fue él el único que pereció por su crimen!''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿No cometió Acán, hijo de Zera, prevaricación en el anatema, y vino ira sobre toda la congregación de Israel? Y aquel hombre no pereció solo en su iniquidad. |
Abandonaron el templo del Señor, Dios de sus antepasados, y adoraron las imágenes de Aserá y de los ídolos. Debido a este pecado, la ira de Dios cayó sobre Judá y Jerusalén.
Luego Moisés les dijo a Aarón y a sus hijos Eleazar e Itamar: «No andéis vosotros con el pelo despeinado, ni os rasguéis los vestidos. Así no moriréis vosotros ni se irritará el Señor contra toda la comunidad. Vuestros hermanos israelitas harán duelo por el incendio que produjo el Señor,
Todo eso sucedió para servirnos de ejemplo, a fin de que no nos apasionemos por lo malo, como lo hicieron ellos.
Los de las tribus de Rubén, Gad y la media tribu de Manasés respondieron a los líderes israelitas:
Sin embargo, los israelitas desobedecieron al Señor, conservando lo que él había decidido que fuera destinado a la destrucción, pues Acán hijo de Carmí, nieto de Zabdí y bisnieto de Zera, guardó para sí parte del botín que Dios había destinado al exterminio. Este hombre de la tribu de Judá provocó la ira del Señor contra los israelitas.
Josué, entonces, hizo pasar a cada uno de los varones de la familia de Zabdí, y la suerte cayó sobre Acán hijo de Carmí, nieto de Zabdí y bisnieto de Zera.
Y Josué y todos los israelitas tomaron a Acán, bisnieto de Zera, y lo llevaron al valle de Acor, junto con la plata, el manto y el oro; también llevaron a sus hijos, sus hijas, el ganado, su tienda y todas sus posesiones. Cuando llegaron al valle de Acor,
El ejército israelita sufrió treinta y seis bajas, y fue perseguido desde la puerta de la ciudad hasta las canteras. Allí, en una pendiente, fueron vencidos. Como resultado, todo el pueblo se acobardó y se llenó de miedo.
Además, condenó a las ciudades de Sodoma y Gomorra, y las redujo a cenizas, poniéndolas como escarmiento para los impíos.