Mi corazón grita por Moab; sus fugitivos huyen hasta Zoar, hasta Eglat Selisiyá. Suben llorando por la cuesta de Luhit; ante el desastre, gritan desesperados por el camino de Joronayin.
Jeremías 50:46 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Tiembla la tierra por la estruendosa caída de Babilonia; resuenan sus gritos en medio de las naciones. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Al grito de la toma de Babilonia la tierra tembló, y el clamor se oyó entre las naciones. Biblia Nueva Traducción Viviente La tierra temblará con el grito: «¡Babilonia ha sido tomada!». Su grito de desesperación se oirá en todo el mundo. Biblia Católica (Latinoamericana) Con el estruendo de la caída de Babilonia se estremece la tierra, y el eco retumba en todos los pueblos. La Biblia Textual 3a Edicion Ante el grito de la conquista de Babilonia se estremece la tierra, y un clamor se oye entre las naciones. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al estruendo de la caída de Babel retiembla la tierra y se oye el griterío en las naciones'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Al grito de la toma de Babilonia la tierra tembló, y el clamor se oyó entre las naciones. |
Mi corazón grita por Moab; sus fugitivos huyen hasta Zoar, hasta Eglat Selisiyá. Suben llorando por la cuesta de Luhit; ante el desastre, gritan desesperados por el camino de Joronayin.
La viña del Señor Todopoderoso es el pueblo de Israel; los hombres de Judá son su huerto preferido. Él esperaba justicia, pero encontró ríos de sangre; esperaba rectitud, pero encontró gritos de angustia.
Pero el Señor es el Dios verdadero, el Dios viviente, el Rey eterno. Cuando se enoja, tiembla la tierra; las naciones no pueden soportar su ira.
Las naciones ya saben de tu humillación; tus gritos llenan la tierra. Un guerrero tropieza contra otro, y juntos caen por tierra».
»Como león que sale de los matorrales del Jordán hacia praderas de verdes pastos, en un instante espantaré de su tierra a los de Edom, y sobre ellos nombraré a mi elegido. Porque, ¿quién como yo? ¿Quién me puede desafiar? ¿Qué pastor se me puede oponer?»
Tiembla la tierra por el estruendo de su caída; hasta en el Mar Rojo resuenan sus gritos.
La tierra tiembla y se sacude; se cumplen los planes de Dios contra Babilonia, al convertirla en un desierto desolado donde nadie ha de habitar.
Ahora, en el día de tu caída, tiemblan los pueblos costeros, y las islas que están en el mar se aterrorizan ante tu desastre”.
Cuando lo hice bajar al abismo, junto con los que descienden a la fosa, con el estruendo de su caída hice temblar a las naciones. Todos los árboles del Edén, los más selectos y hermosos del Líbano, los que estaban mejor regados, se consolaron en las regiones subterráneas.
También haré que por tu causa muchos pueblos queden consternados. Cuando yo esgrima mi espada delante de ellos, sus reyes se estremecerán. En el día de tu desastre, en todo momento temblarán de miedo por temor a perder la vida.