Han arrojado al fuego sus dioses y los han destruido, porque no eran dioses, sino solo madera y piedra, obra de manos humanas.
Jeremías 16:20 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 ¿Acaso puede el hombre hacer sus propios dioses? ¡Pero si no son dioses!» Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 ¿Hará acaso el hombre dioses para sí? Mas ellos no son dioses. Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Acaso puede la gente hacer sus propios dioses? ¡Esos no son dioses verdaderos en absoluto!». Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Puede un hombre fabricarse sus dioses?
¡Qué va, ésos no son dioses! La Biblia Textual 3a Edicion ¿Acaso el hombre se fabrica dioses? ¡Pues esos no son dioses! Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Puede un hombre fabricarse dioses? ¡Pues entonces no son dioses! Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Ha de hacer el hombre dioses para sí? Mas ellos no son dioses. |
Han arrojado al fuego sus dioses y los han destruido, porque no eran dioses, sino solo madera y piedra, obra de manos humanas.
¿Dónde están los dioses de Jamat y de Arfad? ¿Dónde están los dioses de Sefarvayin? ¿Acaso libraron a Samaria de mis manos?
Han arrojado al fuego sus dioses, y los han destruido, porque no eran dioses, sino solo madera y piedra, obra de manos humanas.
¿Hay alguna nación que haya cambiado de dioses, a pesar de que no son dioses? ¡Pues mi pueblo ha cambiado al que es su gloria, por lo que no sirve para nada!
«¿Por qué habré de perdonarte? Tus hijos me han abandonado, han jurado por los que no son dioses. Cuando suplí sus necesidades, ellos cometieron adulterio y en tropel se volcaron a los prostíbulos.
El rey Nabucodonosor mandó hacer una estatua de oro, de veintisiete metros de alto por dos metros y medio de ancho, y mandó que la colocaran en los llanos de Dura, en la provincia de Babilonia.
Os consta además que el tal Pablo ha logrado persuadir a mucha gente no solo en Éfeso, sino en casi toda la provincia de Asia. Él sostiene que no son dioses los que se hacen con las manos.
Pero, aun si alguno de nosotros o un ángel del cielo os predicara un evangelio distinto del que os hemos predicado, ¡que caiga bajo maldición!
Antes, cuando no conocíais a Dios, erais esclavos de los que en realidad no son dioses.