Se sacian de la abundancia de tu casa; les das a beber de tu río de deleites.
Isaías 66:11 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Porque seréis amamantados y saciados, y hallaréis consuelo en sus pechos; beberéis hasta saciaros, y os deleitaréis en sus henchidos senos». Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 para que maméis y os saciéis de los pechos de sus consolaciones; para que bebáis, y os deleitéis con el resplandor de su gloria. Biblia Nueva Traducción Viviente Beban abundantemente de su gloria, como bebe un pequeño hasta saciarse de los pechos consoladores de su madre». Biblia Católica (Latinoamericana) porque tomarán la leche hasta quedar satisfechos de su seno acogedor, y podrán saborear y gustar sus pechos famosos. La Biblia Textual 3a Edicion Porque mamaréis sus pechos y os saciareis de sus consolaciones, Y succionaréis gozosos las ubres de su gloria. Biblia Serafín de Ausejo 1975 para que maméis a sus pechos y os hartéis de sus consuelos; para que chupéis y os solacéis de su abundante seno. Biblia Reina Valera Gómez (2023) para que maméis y os saciéis de los pechos de sus consolaciones; para que ordeñéis, y os deleitéis con la abundancia de su gloria. |
Se sacian de la abundancia de tu casa; les das a beber de tu río de deleites.
Los reyes te adoptarán como hijo, y sus reinas serán tus nodrizas. Se postrarán ante ti rostro en tierra, y lamerán el polvo que tú pises. Sabrás entonces que yo soy el Señor, y que no quedarán avergonzados los que en mí confían».
»¡Levántate y resplandece, que tu luz ha llegado! ¡La gloria del Señor brilla sobre ti!
Te alimentarás con la leche de las naciones, con la riqueza de los reyes serás amamantada. Sabrás entonces que yo, el Señor, soy tu Salvador; que yo, el Poderoso de Jacob, soy tu Redentor.
Mira, las tinieblas cubren la tierra, y una densa oscuridad se cierne sobre los pueblos. Pero la aurora del Señor brillará sobre ti; ¡sobre ti se manifestará su gloria!
Verás esto y te pondrás radiante de alegría; vibrará tu corazón y se henchirá de gozo; porque te traerán los tesoros del mar, y te llegarán las riquezas de las naciones.
Las naciones verán tu justicia, y todos los reyes, tu gloria; recibirás un nombre nuevo, que el Señor mismo te dará.
»En aquel día las montañas destilarán vino dulce, y de las colinas fluirá leche; correrá el agua por los arroyos de Judá. De la casa del Señor brotará una fuente que regará el valle de las Acacias.
desead con ansias la leche pura de la palabra, como niños recién nacidos. Así, por medio de ella, creceréis en vuestra salvación,