Así que guardé silencio, me mantuve callado. ¡Ni aun lo bueno salía de mi boca! Pero mi angustia iba en aumento;
Hechos 8:32 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 El pasaje de la Escritura que estaba leyendo era el siguiente: «Como oveja, fue llevado al matadero; y como cordero que enmudece ante su trasquilador, ni siquiera abrió su boca. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 El pasaje de la Escritura que leía era este: Como oveja a la muerte fue llevado; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió su boca. Biblia Nueva Traducción Viviente El pasaje de la Escritura que leía era el siguiente: «Como oveja fue llevado al matadero. Y, como cordero en silencio ante sus trasquiladores, no abrió su boca. Biblia Católica (Latinoamericana) El pasaje de la Escritura que estaba leyendo era éste: Fue llevado como oveja al matadero, como cordero mudo ante el que lo trasquila, no abrió su boca. La Biblia Textual 3a Edicion El pasaje de la Escritura que leía era éste: Como oveja fue llevado a la matanza; Y como cordero mudo delante del que lo trasquila, Así no abrió° su boca. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El paso de la Escritura que estaba leyendo era éste: Fue llevado como oveja al matadero y como cordero mudo ante el que le trasquila, y no abría la boca. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el lugar de la Escritura que leía era este: Como oveja fue llevado al matadero; y como cordero mudo delante del trasquilador, así no abrió su boca. |
Así que guardé silencio, me mantuve callado. ¡Ni aun lo bueno salía de mi boca! Pero mi angustia iba en aumento;
Pero yo era como un manso cordero que es llevado al matadero; no sabía lo que estaban maquinando contra mí, y que decían: «Destruyamos el árbol con su fruto, arranquémoslo de la tierra de los vivientes, para que nadie recuerde más su nombre».
Señor, tú me conoces; tú me ves y sabes lo que siento por ti. Arrástralos como ovejas al matadero; apártalos para el día de la matanza.
Voy a llevarlos al matadero, como si fueran corderos; como carneros y chivos.
Para el holocausto, presentó un novillo, un carnero y un cordero de un año.
Para el holocausto, presentó un novillo, un carnero y un cordero de un año.
―Padre —dijo Jesús—, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Mientras tanto, echaban suertes para repartirse entre sí la ropa de Jesús.
Al día siguiente Juan vio a Jesús que se acercaba a él, y dijo: «¡Aquí tenéis al Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!
―¿Y cómo voy a entenderlo —contestó— si nadie me lo explica? Así que invitó a Felipe a subir y sentarse con él.
Así está escrito: «Por tu causa siempre nos llevan a la muerte; ¡nos tratan como a ovejas para el matadero!»
Porque ante todo os transmití lo que yo mismo recibí: que Cristo murió por nuestros pecados según las Escrituras,
sino con la preciosa sangre de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin defecto.