Luego enrolló el libro, se lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos los que estaban en la sinagoga lo miraban detenidamente,
Hechos 3:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Pedro, con Juan, mirándolo fijamente, le dijo: ―¡Míranos! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos. Biblia Nueva Traducción Viviente Pedro y Juan lo miraron fijamente, y Pedro le dijo: «¡Míranos!». Biblia Católica (Latinoamericana) Pedro, con Juan a su lado, fijó en él su mirada, y le dijo: 'Míranos. La Biblia Textual 3a Edicion Pedro entonces, con Juan, fijando los ojos en él, dijo: ¡Míranos! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pedro, acompañado por Juan, fijó en él la vista y le dijo: 'Míranos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Pedro, con Juan, fijando sus ojos en él, le dijo: Míranos. |
Luego enrolló el libro, se lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos los que estaban en la sinagoga lo miraban detenidamente,
Cuando Jesús lo vio allí, tirado en el suelo, y se enteró de que ya llevaba mucho tiempo en esa condición, le preguntó: ―¿Quieres quedar sano?
―¿Qué quieres, Señor? —le preguntó Cornelio, mirándolo fijamente y con mucho miedo. ―Dios ha recibido tus oraciones y tus obras de beneficencia como una ofrenda —le contestó el ángel—.
Me fijé en lo que había en ella, y vi cuadrúpedos, fieras, reptiles y aves.
Cierto día subían Pedro y Juan al templo a las tres de la tarde, que es la hora de la oración.
Mientras el hombre seguía aferrado a Pedro y a Juan, toda la gente, que no salía de su asombro, corrió hacia ellos al lugar conocido como Pórtico de Salomón.
Al ver esto, Pedro les dijo: «Pueblo de Israel, ¿por qué os sorprende lo que ha pasado? ¿Por qué nos miráis como si por nuestro propio poder o virtud hubiéramos hecho caminar a este hombre?