Quédense desiertos sus campamentos, y deshabitadas sus tiendas de campaña.
Hechos 1:20 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 »Porque en el libro de los Salmos —continuó Pedro— está escrito: »“Que su lugar quede desierto, y que nadie lo habite”. También está escrito: »“Que otro se haga cargo de su oficio”. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque está escrito en el libro de los Salmos: Sea hecha desierta su habitación, Y no haya quien more en ella; y: Tome otro su oficio. Biblia Nueva Traducción Viviente «Esto estaba escrito en el libro de los Salmos —continuó Pedro—, donde dice: “Que su casa quede desolada y que nadie viva en ella”. También dice: “Que otro tome su lugar”. Biblia Católica (Latinoamericana) Esto estaba escrito en el libro de los Salmos: Que su morada quede desierta y que nadie habite en ella. Pero también está escrito: Que otro ocupe su cargo. La Biblia Textual 3a Edicion Pero, como está escrito en el libro de los salmos: Sea hecha desierta su morada, Y no haya quien habite en ella.° Y: Tome otro su cargo.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues escrito está en el libro de los Salmos: Que se vuelva un desierto su morada, y no haya quien habite en ella. Y también: Que otro ocupe su cargo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque está escrito en el libro de los Salmos: Sea hecha desierta su habitación, y no haya quien more en ella; y: Tome otro su obispado. |
Quédense desiertos sus campamentos, y deshabitadas sus tiendas de campaña.
Después se repondrán las antiguas piedras con otras nuevas, y se resanará la casa con estuco nuevo.
David mismo declara en el libro de los Salmos: »“Dijo el Señor a mi Señor: ‘Siéntate a mi derecha,
―Cuando todavía estaba yo con vosotros, os decía que tenía que cumplirse todo lo que está escrito acerca de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos.
y les dijo: «Hermanos, tenía que cumplirse la Escritura que, por boca de David, había predicho el Espíritu Santo en cuanto a Judas, el que sirvió de guía a los que arrestaron a Jesús.
para que se haga cargo del servicio apostólico que Judas dejó para irse al lugar que le correspondía».
Dios nos la ha cumplido plenamente a nosotros, los descendientes de ellos, al resucitar a Jesús. Como está escrito en el segundo salmo: »“Tú eres mi hijo; hoy mismo te he engendrado”.