Tres hectáreas de viña solo producirán un tonel, y diez medidas de semilla darán tan solo una».
Hageo 2:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 ¿cómo os iba? Cuando alguien se acercaba a un montón de grano esperando encontrar veinte medidas, solo hallaba diez; y, si se iba al lagar esperando sacar cincuenta medidas de la artesa del mosto, solo sacaba veinte. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Antes que sucediesen estas cosas, venían al montón de veinte efas, y había diez; venían al lagar para sacar cincuenta cántaros, y había veinte. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando esperaban veinte medidas de grano, cosechaban solo diez. Cuando esperaban sacar cincuenta litros del lagar, encontraban solo veinte. Biblia Católica (Latinoamericana) ¿qué les pasaba? Venían a un montón de veinte sacos de trigo, pero sólo quedaban diez. Venían a un tanque de cincuenta arrobas de vino y se encontraban sólo veinte. La Biblia Textual 3a Edicion Durante aquel tiempo, cuando alguien llegaba a un montón de veinte efas y había sólo diez, o cuando iba al lagar para sacar cincuenta cubos y había sólo veinte. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿qué ocurría? Que veníais al montón de grano para sacar veinte medidas y sólo había diez; veníais a la cuba para sacar cincuenta medidas y sólo había veinte. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Antes que fuesen estas cosas, venían al montón de veinte, y había diez; venían al lagar para sacar cincuenta cántaros del lagar, y había veinte. |
Tres hectáreas de viña solo producirán un tonel, y diez medidas de semilla darán tan solo una».
De los fértiles campos de Moab han desaparecido el gozo y la alegría. Acabé con el vino de tus lagares; ya nadie pisa las uvas entre gritos de alborozo; los gritos ya no son de regocijo.
»Sembráis mucho, pero cosecháis poco; coméis, pero no quedáis satisfechos; bebéis, pero no llegáis a saciaros; os vestís, pero no lográis abrigaros; y al jornalero se le va su salario como en saco roto».
»Ahora bien, desde hoy en adelante, reflexionad. Antes de que pusierais piedra sobre piedra en la casa del Señor,
Herí vuestros campos con quemazón y con plaga, y con granizo toda obra de vuestras manos. Pero vosotros no os volvisteis a mí —afirma el Señor—.
Si no me hacéis caso ni os decidís a honrar mi nombre —dice el Señor Todopoderoso—, os enviaré una maldición, y maldeciré vuestras bendiciones. Ya las he maldecido, porque no os habéis decidido a honrarme.