Y creó Dios los grandes animales marinos, y todos los seres vivientes que se mueven y pululan en las aguas y todas las aves, según su especie. Y Dios consideró que esto era bueno,
Génesis 1:22 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 y los bendijo con estas palabras: «Sed fructíferos y multiplicaos; llenad las aguas de los mares. ¡Que las aves se multipliquen sobre la tierra!» Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Dios los bendijo con las siguientes palabras: «Sean fructíferos y multiplíquense. Que los peces llenen los mares y las aves se multipliquen sobre la tierra». Biblia Católica (Latinoamericana) Los bendijo Dios, diciendo: 'Crezcan, multiplíquense y llenen las aguas del mar, y multiplíquense asimismo las aves sobre la tierra. La Biblia Textual 3a Edicion Y ’Elohim los bendijo diciendo: Fructificad y multiplicaos, llenad las aguas en los mares y multiplíquese el ave en la tierra. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y Dios los bendijo diciendo: 'Sed fecundos y multiplicaos; llenad las aguas del mar, y que se multipliquen las aves sobre la tierra'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y las aves se multipliquen en la tierra. |
Y creó Dios los grandes animales marinos, y todos los seres vivientes que se mueven y pululan en las aguas y todas las aves, según su especie. Y Dios consideró que esto era bueno,
y los bendijo con estas palabras: «Sed fructíferos y multiplicaos; llenad la tierra y sometedla; dominad a los peces del mar y a las aves del cielo, y a todos los reptiles que se arrastran por el suelo».
Pero Labán le contestó: ―Por favor, quédate. He sabido por adivinación que, gracias a ti, el Señor me ha bendecido.
Lo que tenías antes de mi venida, que era muy poco, se ha multiplicado enormemente. Gracias a mí, el Señor te ha bendecido. Ahora quiero hacer algo por mi propia familia.
Luego Dios añadió: «Yo soy el Dios Todopoderoso. Sé fecundo y multiplícate. De ti nacerá una nación y una comunidad de naciones, y habrá reyes entre tus vástagos.
Saca también todos los seres vivientes que están contigo: las aves, el ganado y todos los animales que se arrastran por el suelo. ¡Que sean fecundos! ¡Que se multipliquen y llenen la tierra!»
Dios bendijo a Noé y a sus hijos con estas palabras: «Sed fecundos, multiplicaos y llenad la tierra.
»Mira a Behemot, criatura mía igual que tú, que se alimenta de hierba, como los bueyes.
El Señor bendijo más los últimos años de Job que los primeros, pues llegó a tener catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas.
¡Que den gracias al Señor por su gran amor, por sus maravillas en favor de los hombres!
Dios los bendijo y se multiplicaron, y no dejó que menguaran sus rebaños.
En el seno de tu hogar, tu esposa será como vid llena de uvas; alrededor de tu mesa, tus hijos serán como vástagos de olivo.
»Yo os mostraré mi favor. Yo os haré fecundos. Os multiplicaré, y mantendré mi pacto con vosotros.