Yo sé, mi Dios, que tú pruebas los corazones y amas la rectitud. Por eso, con rectitud de corazón te he ofrecido voluntariamente todas estas cosas, y he visto con júbilo que tu pueblo, aquí presente, te ha traído sus ofrendas.
Filemón 1:14 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Sin embargo, no he querido hacer nada sin tu consentimiento, para que tu favor no sea por obligación, sino espontáneo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 pero nada quise hacer sin tu consentimiento, para que tu favor no fuese como de necesidad, sino voluntario. Biblia Nueva Traducción Viviente pero no quise hacer nada sin tu consentimiento. Preferí que ayudaras de buena gana y no por obligación. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero no quise hacer nada sin tu acuerdo, ni imponerte una obra buena, sino dejar que la hagas libremente. La Biblia Textual 3a Edicion pero nada quise hacer sin tu consentimiento, para que tu bien no sea como por medio de coacción,° sino voluntariamente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 no obstante, nada he querido hacer sin tu consentimiento, para que esta buena acción tuya no resultara como hecha por compromiso, sino con espontaneidad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) pero nada quise hacer sin tu consentimiento; para que tu favor no fuese como de necesidad, sino voluntario. |
Yo sé, mi Dios, que tú pruebas los corazones y amas la rectitud. Por eso, con rectitud de corazón te he ofrecido voluntariamente todas estas cosas, y he visto con júbilo que tu pueblo, aquí presente, te ha traído sus ofrendas.
Tus tropas estarán dispuestas el día de la batalla, ordenadas en santa majestad. De las entrañas de la aurora recibirás el rocío de tu juventud.
En efecto, si lo hiciera por mi propia voluntad, tendría recompensa; pero, si lo hago por obligación, no hago más que cumplir la tarea que se me ha encomendado.
¿Qué soldado presta servicio militar pagándose sus propios gastos? ¿Qué agricultor planta un viñedo y no come de sus uvas? ¿Qué pastor cuida un rebaño y no toma de la leche que ordeña?
No es que intentemos imponeros la fe, sino que deseamos contribuir a vuestra alegría, pues por la fe os mantenéis firmes.
Porque, si uno lo hace de buena voluntad, lo que da es bien recibido según lo que tiene, y no según lo que no tiene.
Así que me pareció necesario rogar a estos hermanos que se adelantaran a visitaros y completaran los preparativos para esa generosa colecta que habíais prometido. Entonces estará lista como una ofrenda generosa, y no como una tacañería.
Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría.