Éxodo 8:12 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Tan pronto como salieron Moisés y Aarón de hablar con el faraón, Moisés clamó al Señor en cuanto a las ranas que había mandado sobre el faraón. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces salieron Moisés y Aarón de la presencia de Faraón. Y clamó Moisés a Jehová tocante a las ranas que había mandado a Faraón. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Moisés y Aarón salieron del palacio del faraón, y Moisés clamó al Señor acerca de las ranas que le había enviado al faraón. Biblia Católica (Latinoamericana) Nuevamente habló Yavé a Moisés: 'Di a Aarón que golpee con su bastón el polvo de la tierra, y saldrán mosquitos por todo el país. La Biblia Textual 3a Edicion Y Moisés y Aarón salieron de estar con Faraón, y clamó Moisés a YHVH por el asunto de las ranas que Él había puesto sobre Faraón. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo Yahveh a Moisés: 'Di a Aarón: 'Extiende tu cayado y golpea el polvo de la tierra, que se convertirá en mosquitos en todo el país de Egipto''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces salieron Moisés y Aarón de delante del Faraón. Y Moisés clamó a Jehová sobre el asunto de las ranas que había mandado a Faraón. |
En cuanto Moisés salió de la presencia del faraón, rogó al Señor por el faraón.
Moisés intentó apaciguar al Señor su Dios, y le suplicó: ―Señor, ¿por qué ha de encenderse tu ira contra este pueblo tuyo, que sacaste de Egipto con gran poder y con mano poderosa?
El Señor atendió a los ruegos de Moisés, y las ranas comenzaron a morirse en las casas, en los patios y en los campos.
Entonces el faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón, y les dijo: ―Rogadle al Señor que aleje las ranas de mí y de mi pueblo, y yo dejaré ir al pueblo para que le ofrezca sacrificios.
Tan pronto como Moisés dejó al faraón y salió de la ciudad, elevó sus manos en oración al Señor y, en seguida, cesaron los truenos y dejó de granizar y de llover sobre la tierra.
»Así dice el Señor omnipotente: Todavía he de concederle al pueblo de Israel que me suplique aumentar el número de sus hombres, hasta que sean como un rebaño.
En cuanto a mí, que el Señor me libre de pecar contra él dejando de orar por vosotros. Yo seguiré enseñándoos el camino bueno y recto.