El que perturba su casa no hereda más que el viento, y el necio termina sirviendo al sabio.
Eclesiastés 5:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Esto es un mal terrible: que tal como viene el hombre, así se va. ¿Y de qué le sirve afanarse tanto para nada? Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Este también es un gran mal, que como vino, así haya de volver. ¿Y de qué le aprovechó trabajar en vano? Biblia Nueva Traducción Viviente Esto es otro problema muy serio: las personas no se van de este mundo mejor de lo que llegaron. Todo su esfuerzo es en vano, como si trabajaran para el viento. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Cuántos días en que comió pan negro; cuántas decepciones, fatigas y disgustos!' La Biblia Textual 3a Edicion Y este también es un mal grave: el que tenga que irse tal como vino, y ¿qué provecho le quedará de haberse afanado por perseguir el viento? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todos sus días discurren en oscuridad y tristeza, entre grandes dolores, enfermedades y disgustos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Este también es un grave mal, que como vino, así haya de volver. ¿Y de qué le aprovechó trabajar al viento? |
El que perturba su casa no hereda más que el viento, y el necio termina sirviendo al sabio.
Consideré luego todas mis obras y el trabajo que me había costado realizarlas, y vi que todo era absurdo, un correr tras el viento, y que ningún provecho se saca en esta vida.
He visto un mal terrible en esta vida: riquezas acumuladas que redundan en perjuicio de su dueño,
Concebimos, nos retorcimos, pero dimos a luz tan solo viento. No trajimos salvación a la tierra, ni nacieron los habitantes del mundo.
Nunca preguntaron los sacerdotes: “¿Dónde está el Señor?” Los expertos en la ley jamás me conocieron; los pastores se rebelaron contra mí, los profetas hablaron en nombre de Baal y se fueron tras dioses que para nada sirven.
»Sembraron vientos y cosecharán tempestades. El tallo no tiene espiga y no producirá harina; si acaso llegara a producirla, se la tragarían los extranjeros.
Trabajad, pero no por la comida que es perecedera, sino por la que permanece para vida eterna, la cual os dará el Hijo del hombre. Sobre este ha puesto Dios el Padre su sello de aprobación.
que os pongáis a disposición de aquellos y de todo el que colabore en este arduo trabajo.
No os alejéis de él por seguir a ídolos inútiles, que no os pueden ayudar ni rescatar, pues no sirven para nada.