Cuando David llegó a la cumbre del monte, donde se rendía culto a Dios, se encontró con Husay el arquita, que en señal de duelo llevaba las vestiduras rasgadas y la cabeza cubierta de ceniza.
2 Samuel 16:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Entonces Husay el arquita, amigo de David, fue a ver a Absalón y exclamó: ―¡Viva el rey! ¡Viva el rey! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Aconteció luego, que cuando Husai arquita, amigo de David, vino al encuentro de Absalón, dijo Husai: ¡Viva el rey, viva el rey! Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando llegó Husai el arquita, el amigo de David, enseguida fue a ver a Absalón. —¡Viva el rey! —exclamó—. ¡Viva el rey! Biblia Católica (Latinoamericana) Jusaí el arquita, consejero de David, fue a presentarse a Absalón, le dijo: '¡Viva el rey! ¡Viva el rey!' La Biblia Textual 3a Edicion Y sucedió que cuando Husai arquita, el amigo de David, llegó ante Absalón, Husai dijo a Absalón: ¡Viva el rey! ¡Viva el rey! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jusay, el arquita, amigo de David, se presentó a Absalón y le dijo: '¡Viva el rey! ¡Viva el rey!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sucedió que cuando Husai arquita, amigo de David, llegó a donde estaba Absalón, Husai dijo a Absalón: Viva el rey, viva el rey. |
Cuando David llegó a la cumbre del monte, donde se rendía culto a Dios, se encontró con Husay el arquita, que en señal de duelo llevaba las vestiduras rasgadas y la cabeza cubierta de ceniza.
Es mejor que regreses a la ciudad y le digas a Absalón: “Mi rey, estoy a tu servicio. Antes fui siervo de tu padre, pero ahora seré tu siervo”. De ese modo podrás ayudarme a desbaratar los planes de Ajitofel.
Husay, que era amigo de David, llegó a Jerusalén en el momento en que Absalón entraba en la ciudad.
Pregunto esto porque él ha ido hoy a sacrificar una gran cantidad de toros, terneros engordados y ovejas. Además, ha invitado a todos los hijos del rey, a los comandantes del ejército y al sacerdote Abiatar, y allí están todos ellos comiendo y bebiendo, y gritando en su presencia: “¡Viva el rey Adonías!”
para que el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo unjan como rey de Israel. Tocad luego la trompeta, y gritad: “¡Viva el rey Salomón!”
Azarías hijo de Natán, encargado de los gobernadores; Zabud hijo de Natán, sacerdote y consejero personal del rey;
Entonces Joyadá sacó al hijo del rey, le puso la corona y le entregó una copia del pacto. Luego lo ungieron, y todos aplaudieron, gritando: «¡Viva el rey!»
Los astrólogos le respondieron: ―¡Que viva el rey para siempre! Estamos a tu servicio. Cuéntanos el sueño, y nosotros te diremos lo que significa.
Al oír el alboroto que hacían el rey y sus nobles, la reina misma entró en la sala del banquete y exclamó: ―¡Que viva el rey para siempre! ¡Y no se alarme ni se ponga pálido!
Formaron entonces los administradores y sátrapas una comisión para ir a hablar con el rey, y estando en su presencia le dijeron: ―¡Que viva para siempre el rey Darío!
Tanto la gente que iba delante de él como la que iba detrás gritaba: ―¡Hosanna al Hijo de David! ―¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ―¡Hosanna en las alturas!
Dijo entonces Samuel a todo el pueblo: ―¡Mirad al hombre que el Señor ha escogido! ¡No hay nadie como él en todo el pueblo! ―¡Viva el rey! —exclamaron todos.