―Está bien —contestó el rey—, ven con nosotros. Así que Itay el guitita marchó con todos los hombres de David y con las familias que lo acompañaban.
2 Samuel 15:21 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Pero Itay le respondió al rey: ―¡Tan cierto como que el Señor y mi rey viven, juro que, para vida o para muerte, iré adondequiera que mi rey vaya! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y respondió Itai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor el rey, que o para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero Itai le respondió al rey: —Juro por el Señor y por el rey que iré dondequiera que mi señor el rey vaya, sin importar lo que pase, ya sea que signifique la vida o la muerte. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Itaí respondió al rey: 'Por Yavé que vive y por la vida del rey mi señor, donde esté mi señor el rey allí estarán para mí la vida y la muerte'. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Itai respondió al rey y dijo: ¡Vive YHVH y vive mi señor el rey que dondequiera esté mi señor el rey, sea para muerte o para vida, ciertamente allí estará tu siervo! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Itay respondió al rey: '¡Por vida de Yahveh y por vida del rey, mi señor, que adondequiera que esté el rey, allí estará tu siervo para muerte o para vida!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y respondió Itai al rey, diciendo: Vive Jehová, y vive mi señor el rey; ciertamente, ya sea para muerte o para vida, dondequiera que mi señor el rey esté, allí estará también tu siervo. |
―Está bien —contestó el rey—, ven con nosotros. Así que Itay el guitita marchó con todos los hombres de David y con las familias que lo acompañaban.
Entonces Elías le dijo a Eliseo: ―Quédate aquí, pues el Señor me ha enviado a Betel. Pero Eliseo le respondió: ―Tan cierto como que el Señor y tú estáis vivos, te juro que no te dejaré solo. Así que fueron juntos a Betel.
Elías, por su parte, volvió a decirle: ―Quédate aquí, Eliseo, pues el Señor me ha enviado a Jericó. Pero Eliseo le repitió: ―Tan cierto como que el Señor y tú estáis vivos, te juro que no te dejaré solo. Así que fueron juntos a Jericó.
Una vez más Elías le dijo: ―Quédate aquí, pues el Señor me ha enviado al Jordán. Pero Eliseo insistió: ―Tan cierto como que el Señor y tú estáis vivos, te juro que no te dejaré solo. Así que los dos siguieron caminando
Pero la madre del niño exclamó: ―¡Te juro que no te dejaré solo! ¡Tan cierto como que el Señor y tú estáis vivos! Así que Eliseo se levantó y fue con ella.
En todo tiempo ama el amigo; para ayudar en la adversidad nació el hermano.
Hay amigos que llevan a la ruina, y hay amigos más fieles que un hermano.
Cuando él llegó y vio las evidencias de la gracia de Dios, se alegró y animó a todos a hacerse el firme propósito de permanecer fieles al Señor,
―¿Por qué lloráis? ¡Me partís el alma! —respondió Pablo—. Por el nombre del Señor Jesús estoy dispuesto no solo a ser atado, sino también a morir en Jerusalén.
No digo esto para condenaros; ya os he dicho que tenéis un lugar tan amplio en nuestro corazón que con vosotros viviríamos o moriríamos.
Pero David juró y perjuró: ―Tu padre sabe muy bien que tú me estimas, así que seguramente habrá pensado: “Jonatán no debe enterarse, para que no se disguste”. Pero, tan cierto como que el Señor y tú estáis vivos, te aseguro que estoy a un paso de la muerte.
»Pero ahora el Señor te ha impedido a ti derramar sangre y tomarte la justicia por tus propias manos. ¡Tan cierto como que el Señor y tú estáis vivos! Por eso, pido que a tus enemigos, y a todos los que quieran hacerte daño, les pase lo mismo que a Nabal.