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2 Reyes 21:5 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

En ambos atrios del templo del Señor construyó altares en honor de los astros del cielo.

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Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Y edificó altares para todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa de Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Construyó estos altares para todos los poderes de los cielos en ambos atrios del templo del Señor.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Levantó altares a todo el Ejército de los cielos en los dos patios de la casa de Yavé.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y levantó altares para todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la Casa de YHVH.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Erigió asimismo altares a todo el ejército del cielo en los dos atrios del templo de Yahveh.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y edificó altares para todo el ejército del cielo en los dos atrios de la casa de Jehová.

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Lòt tradiksyon



2 Reyes 21:5
17 Referans Kwoze  

Las paredes del atrio interior las construyó con tres hileras de piedra labrada por cada hilera de vigas de cedro.


El muro que rodeaba el gran atrio tenía tres hileras de piedra labrada por cada hilera de vigas de cedro, lo mismo que el atrio interior y el vestíbulo del templo del Señor.


Además, el rey derribó los altares que los reyes de Judá habían erigido en la azotea de la sala de Acaz, y los que Manasés había erigido en los dos atrios del templo del Señor. Los hizo pedazos y echó los escombros en el arroyo de Cedrón.


Luego el rey ordenó al sumo sacerdote Jilquías, a los sacerdotes de segundo rango y a los porteros que sacaran del templo del Señor todos los objetos consagrados a Baal, a Aserá y a todos los astros del cielo. Hizo que los quemaran en los campos de Cedrón, a las afueras de Jerusalén, y que llevaran las cenizas a Betel.


También destituyó a los sacerdotes idólatras que los reyes de Judá habían nombrado para quemar incienso en los altares paganos, tanto en las ciudades de Judá como en Jerusalén, los cuales quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna, al zodíaco y a todos los astros del cielo.


El rey sacó del templo del Señor la imagen para el culto a Aserá y la llevó al arroyo de Cedrón, en las afueras de Jerusalén; allí la quemó hasta convertirla en cenizas, las cuales echó en la fosa común.


y sacó del templo del Señor los dioses extranjeros y el ídolo, arrojando fuera de la ciudad todos los altares que había construido en el monte del templo del Señor y en Jerusalén.


En ambos atrios del templo del Señor construyó altares en honor de los astros del cielo.


Edificó el atrio de los sacerdotes y el atrio mayor con sus puertas, las cuales recubrió de bronce.


Luego me llevó por la puerta del sur hacia el atrio interior. Midió la puerta del sur, la cual tenía las mismas medidas que las anteriores.


También me llevó al atrio interior que daba al oriente, y midió la entrada, y medía igual que las anteriores.


Su vestíbulo miraba hacia el atrio exterior. Los pilares tenían grabados de palmera a cada lado. A esta puerta se llegaba subiendo ocho gradas.


El hombre midió el atrio, que era un cuadrado de cincuenta metros de largo por cincuenta metros de ancho. El altar estaba frente al templo.


Frente a los diez metros del atrio interior, y frente al enlosado del atrio exterior, había en los tres pisos unas galerías, las cuales quedaban unas frente a las otras.


Entonces el Espíritu me levantó y me introdujo en el atrio interior, y vi que la gloria del Señor había llenado el templo.


Y, cuando salgan al atrio exterior, donde está el pueblo, deberán quitarse la ropa con que hayan servido y dejarla en las salas sagradas. Luego se cambiarán de ropa, a fin de no santificar al pueblo por medio de sus vestiduras.


Y me llevó al atrio interior del templo. A la entrada del templo, entre el vestíbulo y el altar, había unos veinticinco hombres que estaban mirando hacia el oriente y adoraban al sol, de espaldas al templo del Señor.