Amasías derrotó a diez mil edomitas en el valle de la Sal; también conquistó la ciudad de Selá y le puso por nombre Joctel, que es como se conoce hasta el día de hoy.
2 Reyes 14:10 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 De hecho, has derrotado a los edomitas, y el éxito se te ha subido a la cabeza. Está bien, jáctate si quieres, pero quédate en casa. ¿Para qué provocas una desgracia que significará tu perdición y la de Judá?» Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Ciertamente has derrotado a Edom, y tu corazón se ha envanecido; gloríate pues, mas quédate en tu casa. ¿Para qué te metes en un mal, para que caigas tú y Judá contigo? Biblia Nueva Traducción Viviente »Es cierto que has derrotado a Edom y estás orgulloso de eso, pero ¡confórmate con tu victoria y quédate en casa! ¿Para qué causar problemas que solo te traerán calamidad a ti y al pueblo de Judá?». Biblia Católica (Latinoamericana) Venciste a Edom y estás orgulloso de ello. Muy bien, ufánate y quédate en casa. ¿Para qué vas a atraer la desgracia y la muerte sobre ti y sobre Judá?' La Biblia Textual 3a Edicion Ciertamente has vencido a Edom, y tu corazón te ha enaltecido. ¡Gloríate de eso y quédate en tu casa! ¿Por qué habrás de provocar una calamidad en la que puedas caer tú y Judá contigo? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por haber derrotado a Edom, se ha engreído tu corazón. Disfruta de esa gloria, pero quédate en tu casa. ¿Para qué provocar una desventura, en la que vas a caer tú y Judá contigo?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ciertamente has derrotado a Edom, y tu corazón se ha envanecido; gloríate, pues, mas quédate en tu casa. ¿Para qué te metes en un mal, para que caigas tú, y Judá contigo? |
Amasías derrotó a diez mil edomitas en el valle de la Sal; también conquistó la ciudad de Selá y le puso por nombre Joctel, que es como se conoce hasta el día de hoy.
Sin embargo, cuando aumentó su poder, Uzías se volvió arrogante, lo cual lo llevó a la desgracia. Se rebeló contra el Señor, Dios de sus antepasados, y se atrevió a entrar en el templo del Señor para quemar incienso en el altar.
Pero Ezequías no correspondió al favor recibido, sino que se llenó de orgullo. Eso hizo que el Señor se encendiera en ira contra él, y contra Judá y Jerusalén.
Necao envió mensajeros a decirle: «No te entrometas, rey de Judá. Hoy no vengo a luchar contra ti, sino contra la nación que me hace la guerra. Dios, que está de mi parte, me ha ordenado que me apresure. Así que no interfieras con Dios, para que él no te destruya».
Moisés le respondió: ―Dime cuándo quieres que ruegue al Señor por ti, por tus funcionarios y por tu pueblo. Las ranas se quedarán solo en el Nilo, y tú y tus casas os libraréis de ellas.
Iniciar una pelea es romper una represa; vale más retirarse que comenzarla.
Honroso es al hombre evitar la contienda, pero no hay necio que no inicie un pleito.
no lo lleves de inmediato al tribunal, pues ¿qué harás si al final tu prójimo te pone en vergüenza?
Eres muy hábil para el comercio; por eso te has hecho muy rico. A causa de tus grandes riquezas te has vuelto muy arrogante.
»”Así dice el Señor omnipotente: A ti me refería yo cuando en tiempos pasados hablé por medio de mis siervos, los profetas de Israel. En aquel tiempo, y durante años, ellos profetizaron que yo te haría venir contra los israelitas.
«Hijo de hombre, encara a Gog, de la tierra de Magog, príncipe soberano de Mésec y Tubal. Profetiza contra él
Con ellos están Persia, Etiopía y Fut, todos ellos armados con escudos y yelmos.
Ante el triunfo obtenido, el rey del sur se llenará de orgullo y matará a miles, pero su victoria no durará
Además, la riqueza es traicionera; por eso el soberbio no permanecerá. Pues ensancha su garganta como el sepulcro, y es insaciable como la muerte. Reúne en torno suyo todas las naciones y toma cautivos todos los pueblos.
no te vuelvas orgulloso ni olvides al Señor tu Dios, quien te sacó de Egipto, la tierra donde viviste como esclavo.
El hermano de condición humilde debe sentirse orgulloso de su alta dignidad,
Pero él nos da mayor ayuda con su gracia. Por eso dice la Escritura: «Dios se opone a los orgullosos, pero da gracia a los humildes».
Abimélec se dirigió a la torre y la atacó. Pero cuando se acercaba a la entrada para prenderle fuego,