En el santuario interior, al fondo del templo, acondicionó el Lugar Santísimo, recubriendo el espacio de nueve metros con tablas de cedro desde el suelo hasta el techo.
2 Crónicas 3:8 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Salomón hizo también el Lugar Santísimo, el cual medía lo mismo que el ancho del templo, es decir, nueve metros de largo y nueve metros de ancho. Lo recubrió por dentro con veintitrés toneladas de oro fino. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Hizo asimismo el lugar santísimo, cuya longitud era de veinte codos según el ancho del frente de la casa, y su anchura de veinte codos; y lo cubrió de oro fino que ascendía a seiscientos talentos. Biblia Nueva Traducción Viviente Hizo el Lugar Santísimo de nueve metros de ancho, igual que la anchura del templo, por nueve metros de profundidad. Revistió el interior con unas veinte toneladas de oro fino. Biblia Católica (Latinoamericana) Construyó también la sala del Lugar Santísimo, cuya longitud, correspondiente al ancho de la Casa, era de veinte codos y su anchura igualmente de veinte codos. Lo revistió de oro puro, por seiscientos talentos. La Biblia Textual 3a Edicion Construyó el lugar santísimo,° cuya longitud, conforme al ancho de la Casa, era de veinte codos, y su anchura de veinte codos, y lo recubrió con seiscientos talentos del mejor oro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Construyó después la cámara del lugar santísimo, cuya longitud, correspondiente a la anchura del edificio, era de veinte codos, y su anchura de otros veinte codos. La recubrió de oro fino, que pesaba seiscientos talentos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Hizo asimismo la casa del lugar santísimo, cuya longitud era de veinte codos según el ancho del frente de la casa, y su anchura de veinte codos; y la cubrió de oro fino que ascendía a seiscientos talentos. |
En el santuario interior, al fondo del templo, acondicionó el Lugar Santísimo, recubriendo el espacio de nueve metros con tablas de cedro desde el suelo hasta el techo.
Cuelga de los ganchos la cortina, la cual separará el Lugar Santo del Lugar Santísimo, y coloca el arca del pacto detrás de la cortina.
Después midió la longitud del recinto interior, que era de diez metros de largo; su anchura era de la misma medida. Entonces me dijo: «Este es el Lugar Santísimo».
Así que, hermanos, mediante la sangre de Jesús, tenemos plena libertad para entrar en el Lugar Santísimo,
Esto nos ilustra hoy día que las ofrendas y los sacrificios que allí se ofrecen no tienen poder alguno para perfeccionar la conciencia de los que celebran ese culto.