Con la ayuda de los levitas, trasladaron el arca del Señor junto con la Tienda de reunión y con todos los utensilios sagrados que había en ella.
1 Reyes 3:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Como en Gabaón estaba el santuario pagano más importante, Salomón acostumbraba a ir allí para ofrecer sacrificios. Allí ofreció mil holocaustos; Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 E iba el rey a Gabaón, porque aquel era el lugar alto principal, y sacrificaba allí; mil holocaustos sacrificaba Salomón sobre aquel altar. Biblia Nueva Traducción Viviente El más importante de esos lugares de culto se encontraba en Gabaón; así que el rey fue allí y sacrificó mil ofrendas quemadas. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey se dirigió a Gabaón para ofrecer allí sacrificios, pues era el principal Lugar Alto. Salomón ofreció muchos sacrificios en ese altar, más de mil holocaustos. La Biblia Textual 3a Edicion Y el rey iba a Gabaón para ofrecer allí sacrificios, por ser el lugar alto más importante. Salomón llegó a ofrecer mil holocaustos sobre aquel altar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fue, pues, el rey a Gabaón para ofrecer sacrificios allí, por ser el lugar alto de mayor importancia. Salomón ofreció mil holocaustos sobre aquel altar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el rey fue a Gabaón a sacrificar allí; porque aquél era el lugar alto principal: Mil holocaustos ofreció Salomón sobre aquel altar. |
Con la ayuda de los levitas, trasladaron el arca del Señor junto con la Tienda de reunión y con todos los utensilios sagrados que había en ella.
Como sacrificio de comunión, Salomón ofreció al Señor veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas. Así fue como el rey y todos los israelitas dedicaron el templo del Señor.
Al sacerdote Sadoc y a sus hermanos sacerdotes los encargó del santuario del Señor, que está en la cumbre de Gabaón,
En aquel tiempo, tanto el santuario del Señor que Moisés hizo en el desierto como el altar del holocausto se encontraban en el santuario de Gabaón.
Salomón habló con todos los israelitas, es decir, con los jefes de mil y de cien soldados, con los gobernantes y con todos los jefes de las familias patriarcales de Israel.
Luego, él y toda la asamblea que lo acompañaba se dirigieron al santuario de Gabaón, porque allí se encontraba la Tienda de la reunión con Dios que Moisés, siervo del Señor, había hecho en el desierto.
Ezequías, rey de Judá, le obsequió a la asamblea mil bueyes y siete mil ovejas, y también los jefes regalaron mil bueyes y diez mil ovejas. Y muchos más sacerdotes se purificaron.
El rey Salomón ofreció veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas. Así fue como el rey y todo el pueblo dedicaron el templo de Dios.
El Líbano no alcanza para el fuego de su altar, ni todos sus animales para los holocaustos.
En el quinto mes de ese mismo año cuarto, es decir, al comienzo del reinado de Sedequías, rey de Judá, el profeta Jananías hijo de Azur, que era de Gabaón, me dijo en la casa del Señor, en presencia de los sacerdotes y de todo el pueblo:
Esto, por supuesto, alarmó grandemente a Adonisédec y a su gente, porque Gabaón era más importante y más grande que la ciudad de Hai; era tan grande como las capitales reales, y tenía un ejército poderoso.
Los clanes de la tribu de Benjamín poseyeron las siguientes ciudades: Jericó, Bet Joglá, Émec Casís,
Los gabaonitas, al darse cuenta de cómo Josué había tratado a las ciudades de Jericó y de Hai,
Saúl ordenó: «Traedme el holocausto y los sacrificios de comunión»; y él mismo ofreció el holocausto.