»No explotes a tu prójimo, ni lo despojes de nada. »No retengas el salario de tu jornalero hasta el día siguiente.
1 Corintios 6:8 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Lejos de eso, sois vosotros los que defraudáis y cometéis injusticias, ¡y conste que se trata de vuestros hermanos! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero vosotros cometéis el agravio, y defraudáis, y esto a los hermanos. Biblia Nueva Traducción Viviente En cambio, son ustedes mismos los que hacen lo malo y estafan aun a sus propios hermanos en Cristo. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Al contrario! ¡Son ustedes que cometen injusticias y perjudican a otros, que además son hermanos! La Biblia Textual 3a Edicion Pero vosotros cometéis el agravio, y defraudáis, y esto a los hermanos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero al contrario: vosotros sois los que perjudicáis y despojáis. ¡Y esto a los hermanos! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas vosotros hacéis la injuria, y defraudáis, y esto a vuestros hermanos. |
»No explotes a tu prójimo, ni lo despojes de nada. »No retengas el salario de tu jornalero hasta el día siguiente.
Codician campos, y se apropian de ellos; casas, y de ellas se adueñan. Oprimen al varón y a su familia, al hombre y a su propiedad.
«De modo que me acercaré a vosotros para juicio. Estaré presto a testificar contra los hechiceros, los adúlteros y los perjuros, contra los que explotan a sus asalariados; contra los que oprimen a las viudas y a los huérfanos, y niegan el derecho del extranjero, sin mostrarme ningún temor —dice el Señor Todopoderoso—.
Pero él contestó a uno de ellos: “Amigo, no estoy cometiendo ninguna injusticia contigo. ¿Acaso no aceptaste trabajar por esa paga?
Ya sabes los mandamientos: “No mates, no cometas adulterio, no robes, no presentes falso testimonio, no defraudes, honra a tu padre y a tu madre”.
El que hace el mal pagará por su propia maldad, y en esto no hay favoritismos.
y que nadie perjudique a su hermano ni se aproveche de él en este asunto. El Señor castiga todo esto, como ya os hemos dicho y advertido.
Oíd cómo clama contra vosotros el salario no pagado a los obreros que trabajaron vuestros campos. El clamor de esos trabajadores ha llegado a oídos del Señor Todopoderoso.