Y partieron de Bet-el, y había aún como media legua de tierra para llegar a Efrata, cuando dio a luz Raquel, y hubo trabajo en su parto.
1 Samuel 4:20 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y al tiempo que se moría, le decían las que estaban junto a ella: No tengas temor, porque has dado a luz un hijo. Mas ella no respondió, ni paró atención. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y al tiempo que moría, le decían las que estaban junto a ella: No tengas temor, porque has dado a luz un hijo. Mas ella no respondió, ni se dio por entendida. Biblia Nueva Traducción Viviente Ella murió después del parto, pero antes de que muriera las parteras trataron de animarla. «No tengas miedo —le dijeron—. ¡Tienes un varón!». Pero ella no contestó ni les prestó atención. Biblia Católica (Latinoamericana) Las mujeres que la asistían, al verla que estaba a punto de morir, le dijeron: '¡Animo! ¡Animo! ¡Has dado a luz un niño! Pero ella no respondió ni puso atención. La Biblia Textual 3a Edicion Y en el momento de su muerte, las que estaban junto a ella decían: No tengas temor, porque has parido un hijo. Pero ella no respondió ni prestó atención. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Estando para morir, le decían las mujeres que la asistían: '¡Ánimo, que has dado a luz un hijo!'. Pero ella no respondió ni prestó atención. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y al tiempo que moría, le decían las que estaban junto a ella: No tengas temor, porque has dado a luz un hijo. Mas ella no respondió, ni puso atención. |
Y partieron de Bet-el, y había aún como media legua de tierra para llegar a Efrata, cuando dio a luz Raquel, y hubo trabajo en su parto.
Al Señor busqué en el día de mi angustia; mi llaga desangraba de noche y no cesaba; mi alma no quería consuelo.
La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque es venida su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la apretura, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo.
Y su nuera, la mujer de Finees, que estaba encinta, cercana al parto, oyendo el rumor que el arca de Dios era tomada, y muertos su suegro y su marido, se encorvó y dio a luz; porque sus dolores se habían ya derramado por ella.