Pues mediré a Jerusalén con el mismo cordel que a Samar a y con la misma plomada que a la casa de Ajab; y fregaré a Jerusalén como se friega un plato, que, después de fregado, se vuelve boca abajo.
Sofonías 1:4 - Biblia Castilian 2003 Extenderé mi mano contra Judá y contra todos los habitantes de Jerusalén; exterminaré de este lugar lo que queda de Baal y el nombre de los sacerdotes idólatras: Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Extenderé mi mano sobre Judá, y sobre todos los habitantes de Jerusalén, y exterminaré de este lugar los restos de Baal, y el nombre de los ministros idólatras con sus sacerdotes; Biblia Nueva Traducción Viviente Aplastaré a Judá y a Jerusalén con mi puño y destruiré todo rastro del culto a Baal. Acabaré con todos los sacerdotes idólatras, para que se borre hasta el recuerdo de ellos. Biblia Católica (Latinoamericana) Levantaré mi mano para castigar a Judá y a todos los habitantes de Jerusalén; sacaré todo lo que queda de Baal y hasta el nombre de sus sacerdotes. La Biblia Textual 3a Edicion Y particularmente extenderé mi mano contra Judá y contra todos los habitantes de Jerusalem, y haré cortar de este lugar lo que queda de Baal, y el nombre de los Chemarim° con los sacerdotes,° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Extenderé mi mano contra Judá y contra todos los habitantes de Jerusalén; exterminaré de este lugar lo que queda de Baal y el nombre de los sacerdotes idólatras: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y extenderé mi mano sobre Judá, y sobre todos los moradores de Jerusalén, y exterminaré de este lugar el remanente de Baal, y el nombre de los ministros idólatras junto con los sacerdotes; |
Pues mediré a Jerusalén con el mismo cordel que a Samar a y con la misma plomada que a la casa de Ajab; y fregaré a Jerusalén como se friega un plato, que, después de fregado, se vuelve boca abajo.
Demolió los altares que hab a en la terraza de la cámara alta de Ajaz, erigidos por los reyes de Judá, as como los altares que hab a erigido Manasés en los dos patios del templo de Yahveh; los sacó de all, los redujo a polvo y arrojó el polvo al torrente Cedrón.
Demolieron en su presencia los altares de los baales, hizo pedazos los obeliscos solares que hab a encima de ellos y las aserás; rompió las imágenes esculpidas y las fundidas, las pulverizó y las esparció sobre los sepulcros de los que les hab an ofrecido sacrificios.
Tú me rechazaste - oráculo de Yahveh -, volviste atrás, y yo alargué mi mano contra ti y te destru; estoy cansado de compadecerme.
Pasarán sus casas a otros, campos y mujeres a la vez; porque voy a extender mi mano contra los habitantes del pa s - oráculo de Yahveh -.
por eso, yo extiendo mi mano contra ti para darte como presa a las naciones, para exterminarte de en medio de los pueblos y hacerte desaparecer de entre los pa ses. Te aniquilaré; y sabrás que yo soy Yahveh'.
Extenderé mi mano contra ellos y haré del pa s una devastación, una desolación, desde el desierto hasta Riblá, en todos sus lugares donde moran; y sabrán que yo soy Yahveh'.
Por el becerro de Bet Avén tiemblan los habitantes de Samar a: su pueblo está de luto por él, por él hacen duelo sus sacerdotes, porque su gloria emigró lejos de él.
Yahveh será terrible contra ellos. Cuando anule a todos los dioses de la tierra, se postrarán ante él, cada una en su lugar, todas las islas de las naciones.
Extenderá su mano contra el norte y acabará con Asiria. Hará de N nive una desolación, un sequedal como el desierto.