y dijo: 'Voy a barrer de la faz de la tierra al hombre que he creado, desde el hombre hasta los animales domésticos, y hasta los reptiles, y las aves del cielo, pues me pesa de haberlos hecho'.
Sofonías 1:3 - Biblia Castilian 2003 Aniquilaré a hombres y animales, aniquilaré las aves del cielo y los peces del mar, haré que tropiecen los imp os. Voy a exterminar a los hombres de la superficie de la tierra - oráculo de Yahveh. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Destruiré los hombres y las bestias; destruiré las aves del cielo y los peces del mar, y cortaré a los impíos; y raeré a los hombres de sobre la faz de la tierra, dice Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Arrasaré con personas y animales por igual; arrasaré con las aves de los cielos y con los peces del mar. Reduciré a los malvados a un montón de escombros y borraré a la humanidad de la faz de la tierra —dice el Señor—. Biblia Católica (Latinoamericana) Acabaré con los hombres y los animales, con las aves del cielo y los peces del mar; arrancaré al hombre de la superficie de la tierra. La Biblia Textual 3a Edicion Destruiré los hombres y las bestias, destruiré las aves de los cielos y los peces del mar, Los motivos de tropiezo° y los que hacen tropezar,° Y haré que el hombre sea cortado de la faz de la tierra, dice YHVH. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Aniquilaré a hombres y animales, aniquilaré las aves del cielo y los peces del mar, haré que tropiecen los impíos. Voy a exterminar a los hombres de la superficie de la tierra -oráculo de Yahveh. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Destruiré hombres y bestias; destruiré las aves del cielo, y los peces del mar, y las piedras de tropiezo con los impíos; y cortaré al hombre de sobre la faz de la tierra, dice Jehová. |
y dijo: 'Voy a barrer de la faz de la tierra al hombre que he creado, desde el hombre hasta los animales domésticos, y hasta los reptiles, y las aves del cielo, pues me pesa de haberlos hecho'.
As, con esto será expiada la culpa de Jacob, y éste será todo el fruto: quitarle su pecado; que deje todas las piedras del altar como piedras de cal desmenuzadas, que no queden en pie ni aserás ni estelas.
'¿Hasta cuándo, Se or?' - pregunté -. Y él me respondió: 'Hasta que queden las ciudades asoladas y sin habitantes, las casas sin hombres, el campo desolado como un desierto.
¿Hasta cuándo hará duelo el pa s y estará la hierba de todo el campo reseca? Por la maldad de sus habitantes, bestias y aves desaparecieron. Pero dicen ellos: 'No ve nuestros caminos'.
Porque sube del norte una nación contra ella que hará de su pa s un desierto, y no quedará en ella un habitante. Tanto los hombres como los animales huyeron, emigraron.
Por eso, as dice el Se or Yahveh: mirad que mi ira y mi furor se va a volcar en este lugar sobre los hombres y sobre los animales, sobre los árboles del campo y sobre los frutos de la tierra; y arderá sin apagarse'.
Haré de Jerusalén una escombrera, una guarida de chacales; de las ciudades de Judá haré un desierto sin habitantes.
Puesto que lo sirvieron ante sus dolos y fueron para la casa de Israel ocasión de pecado, por eso juré con la mano en alto contra ellos - oráculo del Se or Yahveh - que tendr an su castigo.
Tirarán su plata en las calles, y su oro servirá de estiércol. Ni su plata ni su oro podrán salvarlos en el d a de la ira de Yahveh. No saciarán su apetito ni llenarán su vientre, porque fueron ocasión de su pecado.
Llevad preparadas las palabras y volved a Yahveh. Decidle: 'Perdona toda iniquidad, para que recibamos tus bienes, y te ofrezcamos el fruto de nuestros labios.
Volverán los que se sentaban a su sombra: cultivarán el trigo, florecerán como la vi a; serán tan afamados como el vino del L bano.
Por eso la tierra está seca, y todos sus habitantes desfallecen con los animales del campo y las aves del cielo; y aun los peces del mar desaparecen.
Aquel d a sucederá - oráculo de Yahveh Sebaot - que exterminaré del pa s los nombres de los dolos y ya no se les mencionará nunca más. Quitaré también del pa s los profetas y el esp ritu de impureza.
el Hijo del hombre enviará a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los escandalosos y a los que cometen maldades,
Porque yo os digo: ya no me veréis más hasta que digáis: ¡Bendito el que viene en nombre del Se or!'.
Pero tengo algo contra ti: que tienes ah a los que mantienen la doctrina de Balaán, el que ense ó a Balac a poner tropiezo ante los israelitas, a comer de lo inmolado a los dolos y a fornicar.