Más vale buena fama que un buen perfume y el d a de la muerte más que el del nacimiento.
Rut 3:14 - Biblia Castilian 2003 Ella se acostó a los pies de él hasta la ma ana, y se levantó antes de que un hombre pueda reconocer a otro. Y él se dec a: 'Que nadie sepa que esta mujer entró en la era'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y después que durmió a sus pies hasta la mañana, se levantó antes que los hombres pudieran reconocerse unos a otros; porque él dijo: No se sepa que vino mujer a la era. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Rut se acostó a los pies de Booz hasta la mañana, pero ella se levantó muy temprano, antes de que hubiera suficiente luz para que una persona pudiera reconocer a otra; pues Booz había dicho: —Nadie debe saber que estuvo una mujer aquí en el campo de trillar. Biblia Católica (Latinoamericana) Por ahora, sigue durmiendo hasta mañana.
Antes de que amaneciera, cuando todavía no se puede distinguir bien a las personas, se levantó Booz, pues pensaba: 'Nadie debe saber que esta mujer estuvo aquí durmiendo. La Biblia Textual 3a Edicion Ella pues se acostó a sus pies hasta por la mañana: luego se levantó antes que los hombres pudieran reconocerse unos a otros, porque él había dicho: No se sepa que vino mujer a la era. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ella se acostó a los pies de él hasta la mañana, y se levantó antes de que un hombre pueda reconocer a otro. Y él se decía: 'Que nadie sepa que esta mujer entró en la era'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ella durmió a sus pies hasta la mañana, y se levantó antes que alguno pudiese reconocer al otro. Y él dijo: Que no se sepa que vino mujer a la era. |
Más vale buena fama que un buen perfume y el d a de la muerte más que el del nacimiento.
A nadie devolváis mal por mal. Procurad hacer el bien ante todos los hombres.
No seáis motivo de tropiezo ni a jud os, ni a griegos, ni a la iglesia de Dios.
Pues procuramos hacer lo que es bueno, no sólo ante el Se or, sino también ante los hombres.
Llevad entre los gentiles una conducta ejemplar. As, en aquellas mismas cosas en que os calumnian como malhechores, cuando vean vuestras buenas obras glorificarán a Dios en el d a de la visita.
Después le dijo: 'Extiéndeme el manto que llevas encima y sujétalo bien'. Ella lo sujetó bien, y él le entregó seis medidas de cebada y se las puso a cuestas. Luego él se fue a la ciudad.