Ni tan siquiera me dejaste besar a mis hijos y a mis hijas. En verdad has obrado neciamente.
Rut 1:14 - Biblia Castilian 2003 Ellas rompieron de nuevo a llorar. Luego Orfá besó a su suegra y volvió a su pueblo; pero Rut siguió con ella. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y ellas alzaron otra vez su voz y lloraron; y Orfa besó a su suegra, mas Rut se quedó con ella. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces volvieron a llorar juntas y Orfa se despidió de su suegra con un beso, pero Rut se aferró con firmeza a Noemí. Biblia Católica (Latinoamericana) Ellas seguían llorando, hasta que al fin Orfa, dándole un beso, se fue a su casa. Rut, en cambio, se quedó con ella. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces ellas alzaron su voz y lloraron otra vez; y Orfa besó a su suegra, pero Rut siguió apegada a ella. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ellas rompieron de nuevo a llorar. Luego Orfá besó a su suegra y volvió a su pueblo; pero Rut siguió con ella. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas ellas alzando otra vez su voz, lloraron; y Orfa besó a su suegra, mas Ruth se quedó con ella. |
Ni tan siquiera me dejaste besar a mis hijos y a mis hijas. En verdad has obrado neciamente.
Respondió el rey: 'Que venga conmigo Quinhán, y yo haré en favor suyo lo que mejor te pareciere, pues te concederé todo lo que me pidas'.
Eliseo dejó al punto los bueyes, echó a correr tras de El as y le dijo: 'Déjame que vaya a besar a mi padre y a mi madre, y después te seguiré'. Él le respondió: 'Anda y vuelve, pues ya ves lo que he hecho contigo'.
Yahveh se compadecerá de Jacob, elegirá de nuevo a Israel y los asentará en su pa s. El forastero se les unirá y se asociará a la casa de Jacob.
'As dice Yahveh Sebaot: sucederá en aquellos d as que diez hombres de diferentes lenguas de las naciones asirán por la orla del manto a un jud o, diciéndole: 'Queremos ir con vosotros, pues hemos o do que Dios está con vosotros'.'
El que ama a su padre o a su madre más que a m, no es digno de m; y el que ama a su hijo o a su hija más que a m, no es digno de m;
Entonces Jesús dijo a sus disc pulos: 'El que quiera venir en pos de m, niéguese a s mismo, cargue con su cruz y s game.
Pero cuando el joven oyó [estas] palabras se fue, lleno de tristeza, pues pose a muchos bienes.
Algunos, adhiriéndose a él, abrazaron la fe; entre ellos, Dionisio el Areopagita, también una mujer por nombre Dámaris, y algunos otros.
Temerás a Yahveh, tu Dios, le servirás, te allegarás a él y jurarás por su nombre.
En cambio, vosotros, que fuisteis fieles a Yahveh, Dios vuestro, todos estáis vivos hoy.
pues Demas me abandonó por amor de este mundo y se marchó a Tesalónica; Crescente, a Galacia; Tito, a Dalmacia.
Y nosotros no somos de los que se vuelven atrás, para su perdición; sino de los que permanecen en la fe, para salvación del alma.
¿ibais a esperar vosotras hasta que fueran mayores, y por ellos ibais a renunciar a tomar marido ahora? No, hijas m as; siento demasiada compasión por vosotras, porque la mano de Yahveh se ha desatado contra m '.
Dijo entonces Noem: 'Mira, tu cu ada se ha vuelto a su pueblo y a sus dioses; vuélvete también tú tras tu cu ada'.
Salió, pues, con sus dos nueras, del lugar en que hab a residido y se puso en camino para volver al pa s de Judá.
Respondióle Booz: 'Me han informado muy bien de todo lo que hiciste en favor de tu suegra después de morir tu marido, y de cómo abandonaste a tu padre y a tu madre y la tierra de tu parentela, para venir a un pueblo que anteriormente no conoc as.