En el a o octavo de su reinado, siendo aún muy joven, comenzó a buscar al Dios de su padre David; y en el a o duodécimo, comenzó a purificar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, de las aserás y de los dolos fundidos.
Proverbios 8:17 - Biblia Castilian 2003 yo amo a los que me aman, y los que me buscan me encuentran. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan. Biblia Nueva Traducción Viviente »Amo a todos los que me aman. Los que me buscan, me encontrarán. Biblia Católica (Latinoamericana) Amo a los que me aman,
los que me buscan me encuentran. La Biblia Textual 3a Edicion Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan. Biblia Serafín de Ausejo 1975 yo amo a los que me aman, y los que me buscan me encuentran. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Yo amo a los que me aman; y me hallan los que temprano me buscan. |
En el a o octavo de su reinado, siendo aún muy joven, comenzó a buscar al Dios de su padre David; y en el a o duodécimo, comenzó a purificar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, de las aserás y de los dolos fundidos.
Ya que en m se complace, yo le salvo, yo lo pongo en seguro, por conocer mi nombre.
Entonces me llamarán, y no responderé; me buscarán, pero no me encontrarán.
Piensa en tu Creador durante tu juventud, antes de que vengan los d as malos y lleguen los a os en que digas: 'No me gustan';
Apenas los pasé, topé con el amado de mi alma. Le as y ya no le dejaré, hasta meterlo en la casa de mi madre, en la alcoba de la que a m me concibió.
No hablé en lo escondido, ni en lugar tenebroso de la tierra. No dije a la estirpe de Jacob: 'Buscadme en el caos'. Yo soy Yahveh, que digo verdad y declaro lo que es justo.
Buscad primero el reino y su justicia, y todas esas cosas se os darán por a adidura.
Cuando Jesús lo vio, lo llevó muy a mal y les dijo: 'Dejad que los ni os vengan a m, no se lo impidáis; pues el reino de Dios es de los que son como ellos.
'El que tiene mis mandamientos y los guarda, ése es el que me ama. Y al que me ama, mi Padre lo amará, y también yo lo amaré y me manifestaré a él.'
Jesús le contestó: 'Si uno me ama, guardará mi palabra, mi Padre lo amará y vendremos a él para fijar morada en él.
porque el Padre mismo os ama, ya que vosotros me habéis amado y habéis cre do que yo he salido de Dios.
El último d a de la fiesta, que era el más solemne, Jesús, puesto de pie, exclamó con voz fuerte: 'Quien tenga sed venga a m y beba.
Si a alguno de vosotros le falta sabidur a, p dala a Dios, que la da a todos sencillamente y sin echárselo en cara, y se la dará.
Por eso, éste es el oráculo de Yahveh, Dios de Israel: yo hab a dicho que tu casa y la casa de tu padre caminar an en mi presencia por siempre. Pero ahora - oráculo de Yahveh -, ¡lejos de m tal cosa! Porque yo honro a los que me honran y desprecio a los que me desprecian.