La justicia engrandece a un pueblo, el pecado degrada las naciones.
La justicia engrandece a la nación; Mas el pecado es afrenta de las naciones.
La justicia engrandece a la nación, pero el pecado es la deshonra de cualquier pueblo.
Una nación crece por la justicia; el pecado es la vergüenza de los pueblos.
La justicia enaltece a una nación, Pero el pecado es afrenta de los pueblos.
La justicia engrandece a la nación; mas el pecado es afrenta de los pueblos.
Yahveh humillaba a Judá por culpa de Ajaz, rey de Judá, pues hab a pervertido a Judá y hab a prevaricado gravemente contra Yahveh.
de la tierra fecunda hace salinas, por la maldad de sus moradores.
En el corazón inteligente mora la sabidur a, entre los necios no se la conoce.
El favor del rey, para el siervo juicioso; su cólera aniquila al inepto.
El rey justo levanta el pa s, quien lo abruma con impuestos le arruina.
Cuando hablaba Efra n, infund a temor, era jefe en Israel; pero se hizo culpable por Baal y murió.