Alabanza. De David. Yo te quiero ensalzar, mi Dios, el rey, quiero por siempre bendecir tu nombre,
Proverbios 1:23 - Biblia Castilian 2003 Atended mis advertencias; mirad que os abro mi esp ritu, os doy a conocer mis palabras. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Volveos a mi reprensión; He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, Y os haré saber mis palabras. Biblia Nueva Traducción Viviente Vengan y escuchen mi consejo. Les abriré mi corazón y los haré sabios. Biblia Católica (Latinoamericana) Oigan pues mis advertencias, en este momento en que abro mi corazón y les doy a conocer mis pensamientos. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Volveos ante mi reprensión, Y os manifestaré mi espíritu, Y os haré conocer mis palabras! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Atended mis advertencias; mirad que os abro mi espíritu, os doy a conocer mis palabras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Volveos a mi reprensión: He aquí, yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, y os daré a conocer mis palabras. |
Alabanza. De David. Yo te quiero ensalzar, mi Dios, el rey, quiero por siempre bendecir tu nombre,
Camino de vida es guardar la instrucción; quien descuida la reprensión se extrav a.
Quien ama la instrucción ama la ciencia, quien odia la reprensión es necio.
Quien ante los reproches se rebela será aniquilado de repente y sin remedio.
pues antorcha es el precepto y luz la ense anza, y las amonestaciones son camino de vida,
Cuando se derrame sobre nosotros el esp ritu de lo alto, el desierto será un vergel, y el vergel parecerá un bosque:
¡Cielos, desde arriba derramad la lluvia, destilad, nubes, la victoria! ¡Ábrase la tierra y germine la salvación, y brote a la vez la justicia! Yo, Yahveh, lo he creado.
Volved, hijos rebeldes - oráculo de Yahveh -, pues yo soy vuestro due o, y os tomaré: a uno de una ciudad y a dos de una familia, y os llevaré a Sión.
Diles: por mi vida - oráculo del Se or Yahveh -, que no me complazco en la muerte del malvado, sino en que el malvado se convierta de su conducta y viva. Convert os, convert os de vuestra mala conducta. ¿Por qué queréis morir, casa de Israel?'
Tendrá que expiar Samar a, porque fue rebelde a su Dios. A espada caerán, sus ni os serán estrellados, abiertas en canal las mujeres encintas.
As conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo, Yahveh, soy vuestro Dios, y no hay otro. Nunca más será mi pueblo abochornado.
Después de esto, derramaré mi esp ritu sobre toda carne: profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas, sue os so arán vuestros ancianos, visiones verán vuestros jóvenes.
'Pero sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén derramaré un esp ritu de gracia y de oración, y mirarán a aquel a quien ellos mismos traspasaron. Harán duelo por él como se hace duelo por el hijo único y llorarán amargamente por él como se llora amargamente por el primogénito.
Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¿con cuánta más razón el Padre que está en el cielo dará Esp ritu Santo a los que le piden?'.
Esto lo dijo refiriéndose al Esp ritu que hab an de recibir los que creyeran en él; aún no hab a Esp ritu, porque Jesús no hab a sido glorificado todav a.
sino que, primero en Damasco y en Jerusalén, y después en toda la región de Judea y entre los gentiles, me puse a predicar que se convirtieran y volvieran a Dios, haciendo obras en consonancia con esa conversión.
Arrepent os, pues, y convert os, para que sean borrados vuestros pecados,