Sucedió después que Nabot de Yizreel ten a en Yizreel una vi a junto al palacio de Ajab, rey de Samar a.
Oseas 10:7 - Biblia Castilian 2003 Samar a será aniquilada; su rey es como la espuma que flota en el agua. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 De Samaria fue cortado su rey como espuma sobre la superficie de las aguas. Biblia Nueva Traducción Viviente Samaria y su rey serán arrancados; flotarán a la deriva como un madero sobre las olas del mar. Biblia Católica (Latinoamericana) Su rey será sacado de Samaria como se limpia la espuma de la superficie de un estanque. La Biblia Textual 3a Edicion Samaria será destruida, y su rey, espuma encima de las aguas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Samaría será aniquilada; su rey es como la espuma que flota en el agua. Biblia Reina Valera Gómez (2023) De Samaria fue cortado su rey como la espuma sobre la superficie de las aguas. |
Sucedió después que Nabot de Yizreel ten a en Yizreel una vi a junto al palacio de Ajab, rey de Samar a.
Pero el ángel de Yahveh dijo a El as el tesbita: 'Ve y sube al encuentro de los mensajeros del rey de Samar a, y diles: '¿Acaso no hay Dios en Israel y por eso vais a consultar a Baal - Zebub, dios de Ecrón?'.
Oseas, hijo de Elá, urdió una conjuración contra Pécaj, hijo de Romel as, lo hirió, le dio muerte, y se proclamó rey en su lugar en el a o veinte de Jotán, hijo de Azar as.
Pero el rey de Asiria descubrió que Oseas conspiraba, puesto que hab a enviado mensajeros a So, rey de Egipto, y no hab a pagado el tributo anual al rey de Asiria. Por ello el rey de Asiria lo prendió y lo encerró en una cárcel.
As haré con vosotros, casa de Israel, por vuestra inmensa maldad. Al alba desaparecerá por completo el rey de Israel.
Ahora dicen: 'No tenemos rey; tampoco tenemos a Yahveh. ¿Qué puede hacer por nosotros?'.
Abatidas serán las alturas de Avén, el pecado de Israel; espinas y abrojos treparán por sus altares. Entonces dirán a los montes: '¡Cubridnos!' y a los collados: '¡Caed sobre nosotros!'.
olas furiosas del mar que arrojan la espuma de su desvergüenza, estrellas fugaces a las que está reservada para siempre la lobreguez de las tinieblas.