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Mateo 7:7 - Biblia Castilian 2003

Pedid y os darán; buscad y encontraréis; llamad y os abrirán.

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Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Sigue pidiendo y recibirás lo que pides; sigue buscando y encontrarás; sigue llamando, y la puerta se te abrirá.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Pidan y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad a la puerta y se os abrirá.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pedid y os darán; buscad y encontraréis; llamad y os abrirán.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.

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Lòt tradiksyon



Mateo 7:7
43 Referans Kwoze  

Aquel mismo d a llegaron los criados de Isaac y le informaron acerca del pozo que hab an cavado, diciéndole: 'Hemos encontrado agua'.


En Gabaón se apareció Yahveh a Salomón en sue os durante la noche. Y le dijo Dios: 'P deme lo que quieras que te dé'.


El anhelo de los pobres tú lo sientes, Se or; Tau confórtalos y atiéndelos, vengando los derechos del huérfano y del débil, y no siembre más terror el hombre de la tierra.


Con el rostro altanero, no le busca; (Nun) 'Dios no existe', es cuanto se le antoja.


Bendito seas, Se or, ensé ame tus leyes.


De ti me dicta el corazón: 'Requerid mi presencia': tu presencia es, Se or, lo que yo busco.


Alabad conmigo al Se or, Gu mel ensalcemos al un sono su nombre.


Si en el Se or pones tu gozo, te dará él lo que pidan tus deseos.


Invócame en el d a de la angustia: te libraré y tú me darás gloria.


Será acepto al Se or, más que los toros o el becerro de cuernos y pezu as.


que se ofusquen y avergüencen los que dicen: 'Ajá, ajá'.


Tú eres bueno, Se or, e indulgente, generoso en favores para todo el que te invoca.


yo amo a los que me aman, y los que me buscan me encuentran.


Me levanté, recorr la villa por callejas y plazas, en busca del amado de mi alma. Lo buscaba y no lo hallé.


Y tú, pueblo m o, que estás en Sión, que habitas en Jerusalén, ya no llorarás más; porque tendrá piedad de ti cuando escuche tu gemido, apenas lo oiga, te responderá.


llámame y te responderé; te anunciaré cosas grandes e inaccesibles que tú no conoces.


Pues as dice Yahveh a la casa de Israel: 'Buscadme y viviréis'.


Os aseguro además: si dos de vosotros unen sus voces en la tierra para pedir cualquier cosa, la conseguirán de mi Padre que está en el cielo.


Y todo cuanto pidáis en la oración con fe, lo obtendréis'.


Buscad primero el reino y su justicia, y todas esas cosas se os darán por a adidura.


Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¿con cuánta más razón vuestro Padre que está en el cielo dará cosas buenas a los que le piden?


Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, encuentra; y al que llama, le abren.


Por eso os digo: todo cuanto pidáis en la oración, creed que ya lo habéis obtenido y se os concederá.


Después que el amo de la casa se haya levantado a cerrar la puerta, vosotros os quedaréis fuera y comenzaréis a llamar a la puerta, diciendo: 'Se or, ábrenos'. Pero él os responderá: 'No sé de dónde sois vosotros'.


Luego les propuso una parábola sobre la necesidad que ten an de orar siempre y de no cansarse nunca.


No me habéis elegido vosotros, sino que yo os eleg, y os he puesto para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto sea permanente; para que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, él os lo dé.


Si permanecéis en m y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis, y os será concedido.


Jesús le respondió: 'Si conocieras el don de Dios: quién es el que te dice 'dame de beber', ser as tú la que le habr as pedido y él te habr a dado agua viva'.


a quienes, siendo constantes en el bien obrar, buscan gloria y honra e inmortalidad, les dará vida eterna;


no hay quien tenga recto sentido, no hay quien busque a Dios.


Y sin fe es imposible agradarle, pues el que se acerca a Dios debe creer que existe y que recompensa a los que lo buscan.


La oración de la fe salvará al enfermo, y el Se or hará que se levante, y si hubiese cometido pecados se le perdonarán.


Y lo que pidamos, lo recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada.