Hizo, además, el velo de púrpura violácea, de púrpura escarlata, de carmes y de lino fino; y mandó bordar sobre él querubines.
Mateo 27:51 - Biblia Castilian 2003 Y al momento, el velo del templo se rasgó en dos de arriba abajo; la tierra tembló y las rocas se hendieron; Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló, y las rocas se partieron; Biblia Nueva Traducción Viviente En ese momento, la cortina del santuario del templo se rasgó en dos, de arriba abajo. La tierra tembló, las rocas se partieron en dos, Biblia Católica (Latinoamericana) En ese mismo instante la cortina del Santuario se rasgó de arriba abajo, en dos partes. La Biblia Textual 3a Edicion Y he aquí el velo° del santuario fue rasgado en dos, de arriba abajo, y la tierra fue sacudida, y las rocas fueron partidas, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y al momento, el velo del templo se rasgó en dos de arriba abajo; la tierra tembló y las rocas se hendieron; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo, y la tierra tembló, y las rocas se partieron: |
Hizo, además, el velo de púrpura violácea, de púrpura escarlata, de carmes y de lino fino; y mandó bordar sobre él querubines.
Cuando lanza sus flechas se dispersan, cuando fulmina sus rayos se dislocan.
En mi aprieto yo clamo al Se or, a mi Dios elevo el grito, y él escucha mi voz desde su templo, mi clamor alcanza a sus o dos.
Metió el arca en el santuario, puso el velo de separación y ocultó el arca del testimonio, tal como hab a ordenado Yahveh a Moisés.
Destruirá en este monte el velo que cubre la cara de los pueblos, el pa o que tapa a todas las naciones.
pero no se acercará al velo ni llegará hasta el altar, porque tiene un defecto. No profanará mi santuario, pues yo soy Yahveh, el que los santifico'.
tiemblan los montes al verte, pasa una tromba de agua alza su voz el abismo, el sol levanta sus manos a lo alto
Saliste para salvar a tu pueblo, para salvar a tu ungido. Aplastas el techo de la casa del imp o, descubres sus cimientos hasta la roca. Selah
Cuando tenga que levantarse el campamento, se acercarán Aarón y sus hijos, descolgarán el velo de protección y cubrirán con él el arca del testimonio.
Cuando el centurión y los que con él estaban custodiando a Jesús sintieron el terremoto y lo que pasaba quedaron sobrecogidos de espanto y dec an: 'Realmente, éste era Hijo de Dios'.
De pronto se produjo un gran terremoto; porque un ángel del Se or bajó del cielo, se acercó, hizo rodar la piedra y se sentó encima de ella.
Cuando el centurión vio lo sucedido, glorificaba a Dios, diciendo: 'Verdaderamente, este hombre era un justo'.
Como a un ancla firme y segura de nuestra vida nos asimos a esta esperanza, que va penetrando hasta detrás del velo,
En aquel momento se produjo un gran terremoto; se derrumbó la décima parte de la ciudad y murieron por el terremoto siete mil personas. Los demás quedaron quedaron sobrecogidos de espanto y dieron gloria al Dios del cielo.
Se abrió el santuario de Dios que está en el cielo y apareció el arca de su alianza en su santuario. Y hubo relámpagos y voces y truenos y terremoto y una gran granizada.