Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Mateo 27:4 - Biblia Castilian 2003

diciendo: 'He pecado entregando sangre inocente'. Pero ellos contestaron: 'Y a nosotros, ¿qué? ¡Allá tú!'.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? ¡Allá tú!

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

—He pecado —declaró—, porque traicioné a un hombre inocente. —¿Qué nos importa? —contestaron—. Ese es tu problema.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Les dijo: 'He pecado: he entregado a la muerte a un inocente. Ellos le contestaron: '¿Qué nos importa eso a nosotros? Es asunto tuyo.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

diciendo: Pequé entregando sangre inocente. Pero ellos dijeron: ¿Y a nosotros qué? ¡Allá tú!

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

diciendo: 'He pecado entregando sangre inocente'. Pero ellos contestaron: 'Y a nosotros, ¿qué? ¡Allá tú!'.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

diciendo: Yo he pecado entregando la sangre inocente. Pero ellos dijeron: ¿Qué a nosotros? Míralo tú.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Mateo 27:4
33 Referans Kwoze  

Al o r Ajab todas estas palabras, rasgó sus vestiduras, se puso un saco sobre la carne y ayunó. Se acostaba con el saco puesto y andaba abatido.


también por la sangre inocente que hab a derramado, hasta llenar de ella a Jerusalén. Por eso Yahveh no quiso perdonar.


Vosotros sólo sois urdidores de mentiras, curanderos vanos sois todos vosotros.


'¡Cuántas veces oyendo lo mismo! ¡Valientes consoladores sois vosotros!


Atentan contra la vida de los justos y hacen culpable la sangre inocente.


Todav a de noche, llamó a Moisés y a Aarón y les dijo: 'Levantaos, salid de en medio de mi pueblo, vosotros y los israelitas, id a dar culto a Yahveh, como habéis dicho.


El Faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón y les dijo: 'Esta vez he pecado. Yahveh es justo; yo y mi pueblo somos culpables.


Según su prudencia es estimado el hombre; el de perverso corazón cae en el desprecio.


Pero debéis saber bien que, si me matáis, echáis sangre inocente sobre vosotros, sobre esta ciudad y sobre sus habitantes, porque es Yahveh quien me ha enviado a vosotros para pronunciar ante vuestros o dos todas estas palabras'.


Entonces clamaron a Yahveh, diciendo: '¡Oh Yahveh! ¡Que no perezcamos nosotros por causa de este hombre, ni nos hagas responsables de sangre inocente, ya que tú, Yahveh, has hecho lo que has querido!'.


Mientras estaba sentado en el tribunal, su mujer le envió un recado: 'No te metas con ese justo; que hoy, en sue os, he sufrido mucho por su causa'.


Cuando el centurión y los que con él estaban custodiando a Jesús sintieron el terremoto y lo que pasaba quedaron sobrecogidos de espanto y dec an: 'Realmente, éste era Hijo de Dios'.


Insistió Pilato por tercera vez.'¿Pues qué mal ha hecho éste? Yo no he encontrado en él ningún delito de muerte; as que le daré un escarmiento y lo pondré en libertad'.


Nosotros con justicia; pues estamos recibiendo lo merecido por nuestras fechor as. Pero éste nada malo ha hecho'.


Cuando el centurión vio lo sucedido, glorificaba a Dios, diciendo: 'Verdaderamente, este hombre era un justo'.


Respondiéronle los jud os: 'Nosotros tenemos una ley y según esa ley debe morir, porque se ha declarado Hijo de Dios'.


y, sin encontrar causa alguna de muerte, pidieron a Pilato que lo quitara de en medio.


Ahora bien, sabemos que cuanto dice la ley, para aquellos que están bajo la ley lo dice, a fin de que nadie pueda rechistar y el mundo entero se sienta reo de culpa ante Dios;


por causa de embaucadores hipócritas, que tienen marcada a fuego su propia conciencia,


Profesan conocer a Dios, pero con sus obras lo niegan: son seres abominables, rebeldes e incapaces de nada bueno.


Tal es también el sumo sacerdote que nos era conveniente: santo, inocente, sin mancha, separado de los pecadores y encumbrado sobre el cielo.


sino con sangre preciosa, como de cordero sin defecto ni tara, la de Cristo,


No como Ca n, que era del Maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué lo mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.


Los moradores de la tierra se alegrarán y regocijarán a costa de ellos y se enviarán mutuos regalos, porque estos dos profetas atormentaron a los moradores de la tierra'.


Saúl dijo entonces a Samuel: 'He pecado, porque he transgredido el mandato de Yahveh y tus palabras; pero ha sido porque tuve miedo al pueblo y escuché su clamor.


Saúl entonces exclamó: 'Yo he pecado; pero ahora hónrame, por favor, ante los ancianos de mi pueblo y ante Israel y vente conmigo para que yo adore a Yahveh, tu Dios'.


Expuso su vida y mató al filisteo; y con ello Yahveh concedió una gran victoria a todo Israel. Tú lo viste y te alegraste. ¿Por qué te vas a hacer reo de sangre inocente dando muerte a David sin motivo?'.