Porque donde están dos o tres congregados para invocar mi nombre, all estoy yo entre ellos'.
Mateo 26:11 - Biblia Castilian 2003 Porque a los pobres siempre los tenéis con vosotros; pero a m no me tendréis siempre. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque siempre tendréis pobres con vosotros, pero a mí no siempre me tendréis. Biblia Nueva Traducción Viviente Siempre habrá pobres entre ustedes, pero a mí no siempre me tendrán. Biblia Católica (Latinoamericana) Siempre tienen a los pobres con ustedes, pero a mí no me tendrán siempre. La Biblia Textual 3a Edicion porque a los pobres siempre los tenéis con vosotros,° pero a mí no siempre me tendréis.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque a los pobres siempre los tenéis con vosotros; pero a mí no me tendréis siempre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque a los pobres siempre los tenéis con vosotros, pero a mí no siempre me tenéis. |
Porque donde están dos o tres congregados para invocar mi nombre, all estoy yo entre ellos'.
Pero cuando Jesús se dio cuenta de ello, les dijo: '¿Por qué molestáis a esta mujer? Ha hecho en mi favor una buena obra.
y ense ándoles a observar todo cuanto yo os he mandado. Y mirad: yo estoy con vosotros todos los d as hasta el final de los tiempos'.
Porque a los pobres siempre los tenéis con vosotros, y cuando queráis les podéis hacer bien; pero a m no me tendréis siempre.
Porque a los pobres siempre los tenéis con vosotros; pero a m no me tenéis siempre'.
'Hijitos, ya es poco el tiempo que voy a estar con vosotros. Me buscaréis y, como dije a los jud os, también os digo ahora a vosotros: a donde yo voy, no podéis venir vosotros.'
Dentro de poco, el mundo ya no me verá; pero vosotros me veréis, porque yo sigo viviendo y vosotros viviréis.
Sal del Padre y he venido al mundo; ahora dejo el mundo y me voy al Padre.'
'Ahora me voy al que me ha enviado y ninguno de vosotros me pregunta; '¿Adónde vas?'.
Yo no estoy ya en el mundo; pero ellos se quedan en el mundo, mientras que yo voy a ti. Padre santo, guárdalos en tu nombre, en ese nombre que me has dado, para que también ellos, lo mismo que nosotros, sean uno.
a quien el cielo debe retener hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas de que habló Dios por boca de sus santos profetas desde antiguo.
Solamente nos rogaron que nos acordáramos de los pobres, cosa que me apresuré a cumplir con escrupulosa exactitud.
Cierto que nunca faltarán menesterosos en el pa s y por eso te ordeno: abrirás tu mano a tu hermano, al pobre de entre los tuyos y al indigente en tu tierra.
Si uno tiene bienes del mundo y viendo que su hermano pasa necesidad le cierra sus entra as, ¿cómo permanece en él el amor de Dios?