en no comprar nada en sábado o en d a santo a las gentes del pa s que traigan para vender mercanc as o cualquier clase de comestibles en d a de sábado, y en renunciar el a o séptimo a la cosecha y a toda clase de deudas.
Mateo 17:24 - Biblia Castilian 2003 Cuando entraron en Cafarnaún, se acercaron a Pedro los que cobraban el impuesto de las dos dracmas y le preguntaron: '¿Vuestro maestro no paga el impuesto?'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Cuando llegaron a Capernaum, vinieron a Pedro los que cobraban las dos dracmas, y le dijeron: ¿Vuestro Maestro no paga las dos dracmas? Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando llegaron a Capernaúm, los cobradores del impuesto del templo se acercaron a Pedro y le preguntaron: —¿Tu maestro no paga el impuesto del templo? Biblia Católica (Latinoamericana) Al volver a Cafarnaún, se acercaron a Pedro los que cobran el impuesto para el Templo. Le preguntaron: 'El maestro de ustedes, ¿no paga el impuesto?' La Biblia Textual 3a Edicion Cuando llegaron a Cafarnaum, se acercaron a Pedro los que cobran° las dos dracmas, y dijeron: ¿Vuestro Maestro no paga las dos dracmas? Contestó: Sí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando entraron en Cafarnaún, se acercaron a Pedro los que cobraban el impuesto de las dos dracmas y le preguntaron: '¿Vuestro maestro no paga el impuesto?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando llegaron a Capernaúm, vinieron a Pedro los que cobraban los tributos, diciendo: ¿Vuestro maestro no paga los tributos? |
en no comprar nada en sábado o en d a santo a las gentes del pa s que traigan para vender mercanc as o cualquier clase de comestibles en d a de sábado, y en renunciar el a o séptimo a la cosecha y a toda clase de deudas.
Esto es lo que entregará cada uno de los que están incluidos en el censo: medio siclo, según el peso del siclo del santuario, que es de veinte gerah por siclo; el medio siclo será un tributo a Yahveh.
es decir, una beqa por cabeza, o sea, medio siclo, según el peso del siclo del santuario, por cada hombre de veinte a os para arriba incluido en el censo. El total de hombres era seiscientos tres mil quinientos cincuenta.
Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen eso mismo también los publicanos?
Llegaron a Cafarnaún. Estando ya él en la casa, les preguntó: '¿De qué ven ais discutiendo por el camino?'.