Entonces se querelló el pueblo contra Moisés, diciendo: 'Danos agua para que bebamos'. Moisés les respondió: '¿Por qué os querelláis contra m ? ¿Por qué tentáis a Yahveh?'.
Marcos 8:11 - Biblia Castilian 2003 Salieron los fariseos y se pusieron a discutir con él, pidiéndole, para ponerle a prueba, una se al venida del cielo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Vinieron entonces los fariseos y comenzaron a discutir con él, pidiéndole señal del cielo, para tentarle. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los fariseos oyeron que Jesús había llegado, se acercaron y comenzaron a discutir con él. Para ponerlo a prueba, exigieron que les mostrara una señal milagrosa del cielo que demostrara su autoridad. Biblia Católica (Latinoamericana) Vinieron los fariseos y empezaron a discutir con Jesús. Querían ponerlo en apuros, y esperaban de él una señal que viniera del Cielo. La Biblia Textual 3a Edicion Y los fariseos salieron y comenzaron a discutir con Él, pidiéndole una señal del cielo,° a fin de tentarlo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Salieron los fariseos y se pusieron a discutir con él, pidiéndole, para ponerle a prueba, una señal venida del cielo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vinieron los fariseos y comenzaron a altercar con Él, y tentándole, le pedían señal del cielo. |
Entonces se querelló el pueblo contra Moisés, diciendo: 'Danos agua para que bebamos'. Moisés les respondió: '¿Por qué os querelláis contra m ? ¿Por qué tentáis a Yahveh?'.
Y dio al lugar el nombre de Masá y Meribá, por la querella de los israelitas, y porque hab an puesto a Yahveh a prueba, diciendo: '¿Está Yahveh en medio de nosotros o no?'.
Por eso llamamos dichosos a los soberbios: los que cometen la iniquidad prosperan, incluso los que tientan a Dios quedan impunes'.
Entonces se dirigieron a él algunos escribas y fariseos con estas palabras: 'Maestro, quisiéramos ver alguna se al tuya'.
Se le acercaron algunos fariseos para ponerle a prueba y le preguntaron: '¿Puede uno despedir a su mujer por un motivo cualquiera?'.
Entró en el templo y, mientras estaba ense ando, se acercaron los pont fices y los ancianos del pueblo y le preguntaron: '¿Con qué autoridad haces tú esas cosas y quién te dio esa autoridad?'.
Entonces los fariseos se fueron y acordaron en consejo ponerle una trampa para sorprenderle en alguna palabra.
Pero Jesús, conociendo su malicia, les dijo: '¿Por qué me tendéis trampas, hipócritas?
Aquel mismo d a se le acercaron algunos saduceos - que afirman que no hay resurección - y le preguntaron:
Pero él, sabiendo bien su hipocres a, les dijo: '¿Por qué me tendéis trampas? Traedme un denario para verlo'.
Los escribas y fariseos, al ver que com a con pecadores y publicanos, dec an a sus disc pulos: '¿Pero es que come con publicanos y pecadores?'.
Entonces se levantó un doctor de la ley que, para ponerlo a prueba, le preguntó: 'Maestro, ¿qué debo hacer yo para heredar vida eterna?'.
Hab a también otros que, para ponerlo a prueba, le reclamaban una se al venida del cielo.
Entonces le dijo Jesús: 'Como no veáis se ales y prodigios, nunca jamás creeréis'.
Entonces ellos le replicaron: 'Pues, ¿qué se al vas a dar tú, para que, al verla, creamos en ti? ¿Qué vas a realizar?
Dec an esto para tenderle un lazo, con el fin de tener de qué acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, escrib a en el suelo con el dedo.
Y Pedro a ella: '¿Conque os pusisteis de acuerdo entre vosotros para tentar al Esp ritu del Se or? Pues mira, están llegando a la puerta los que acaban de enterrar a tu marido, y te llevarán a ti'.
Ni tentemos al Se or, como lo tentaron algunos de ellos, que perecieron por causa de las serpientes.