Abisay, hijo de Servia, tomó la palabra y dijo: '¿No va a morir Seme por haber ultrajado al ungido de Yahveh?'.
Lucas 9:55 - Biblia Castilian 2003 Pero Jesús, volviéndose hacia ellos, los reprendió. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Jesús se volvió a ellos y los reprendió. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Jesús se volvió y los reprendió. La Biblia Textual 3a Edicion Pero volviéndose,° los reprendió.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Jesús, volviéndose hacia ellos, los reprendió. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces volviéndose Él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; |
Abisay, hijo de Servia, tomó la palabra y dijo: '¿No va a morir Seme por haber ultrajado al ungido de Yahveh?'.
Pero él respondió: 'Hablas como una necia. Si aceptamos la dicha que Dios nos env a, ¿por qué no aceptar la desgracia?'. En nada de esto pecó Job con sus labios.
No corrijas al insolente, que te odiará; corrige al sabio, y te estimará.
Nada hay más tramposo que el corazón y está desahuciado; ¿quién podrá entenderlo?
Pero él, volviéndose, le dijo a Pedro: 'Qu tate de mi presencia, satanás, eres un tropiezo para m, porque tu pensamiento no es divino, sino humano'.
Pedro, tomando la palabra, le dijo: 'Aunque todos se escandalicen por causa tuya, yo jamás me escandalizaré'.
Velad y orad, para que no ceder en la tentación; el esp ritu está dispuesto, pero la carne es débil'.
Uno de los que estaban con Jesús echó mano a la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le amputó la oreja.
Cuando los disc pulos Santiago y Juan vieron esto le dijeron: 'Se or, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo y los devore? '.
De la misma boca salen bendición y maldición. Esto, hermanos m os, no debe ser as.
no devolváis mal por mal, ni insulto por insulto, sino, al contrario, bendecid, porque para esto habéis sido llamados, para ser herederos de la bendición.
Yo, a los que amo, los reprendo y castigo. ¡An mate, pues, y conviértete!