Si Yahveh Sebaot no nos hubiera dejado un resto, ser amos como Sodoma, semejantes a Gomorra.
Lucas 17:29 - Biblia Castilian 2003 pero, el d a en que salió Lot de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre y acabó con todos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 mas el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos. Biblia Nueva Traducción Viviente hasta la mañana en que Lot salió de Sodoma. Entonces llovió del cielo fuego y azufre ardiente, y destruyó a todos. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero el día que salió Lot de Sodoma cayó del cielo una lluvia de fuego y azufre que los mató a todos. La Biblia Textual 3a Edicion pero el día en que Lot salió de Sodoma, llovió fuego y azufre del cielo y los destruyó a todos.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 pero, el día en que salió Lot de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre y acabó con todos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) pero el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y destruyó a todos. |
Si Yahveh Sebaot no nos hubiera dejado un resto, ser amos como Sodoma, semejantes a Gomorra.
Y será Babel - joya de los reinos, adorno soberbio de los caldeos - como la destrucción de Dios sobre Sodoma y Gomorra.
Como cuando Dios destruyó a Sodoma, a Gomorra y a sus vecinas - oráculo de Yahveh -: no habitará all hombre alguno ni residirá en ella ningún ser humano.
¿Cómo podré yo abandonarte, Efra n; cómo entregarte, Israel? ¿Cómo podré yo dejarte como a Admá, ni hacerte semejante a Sebo n? Mi corazón se remueve dentro de m, a la vez que se conmueven mis entra as.
Os derribé como Dios derribó a Sodoma y a Gomorra, y fuisteis como tizón sacado del incendio, pero no habéis vuelto a m - oráculo de Yahveh -.
Por eso, juro por mi vida - oráculo de Yahveh Sebaot, Dios de Israel -: Moab será como Sodoma, los hijos de Amón como Gomorra: campo de ortigas, mina de sal, desolación eterna. El resto de mi pueblo los saqueará, el residuo de mi nación los heredará.
Otro tanto sucedió en los tiempos de Lot: com an y beb an, compraban y vend an, plantaban y edificaban;
Condenó a la destrucción a las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndolas a ceniza y ofreciendo un ejemplo para imp os venideros.
Y de igual modo, también Sodoma y Gomorra y las ciudades circunvecinas sirven de escarmiento y sufren el castigo de un fuego eterno, porque, lo mismo que ellos, se entregaron a la prostitución y a los vicios contra la naturaleza.
Sus cadáveres quedarán tendidos en la plaza de la gran ciudad que simbólicamente se llaman Sodoma y Egipto, donde también su Se or fue crucificado.
beberá él también del vino del furor de Dios, vino puro, concentrado, en la copa de su ira. Será atormentado con fuego y azufre en presencia de los ángeles santos y en presencia del Cordero.
Cayó prisionera la bestia, y con ella el falso profeta, el que hac a a su servicio las se ales con las que extravió a los que recibieron la marca de la bestia y a cuantos adoraron su imagen. Ambos fueron arrojados vivos al lago de fuego que arde en azufre.