Llegada la tarde, se le acercaron los disc pulos y le dijeron: 'Esto es un despoblado, y la hora está avanzada; despide, pues, a la gente, que vayan a las aldeas a comprarse alimentos'.
Lucas 10:40 - Biblia Castilian 2003 Marta, entre tanto, andaba atareada con los muchos quehaceres. Por fin, se paró y dijo: 'Se or, ¿es que no te importa que mi hermana me deje sola con todo el traj n de la casa? Dile que venga a echarme una mano'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Biblia Nueva Traducción Viviente pero Marta estaba distraída con los preparativos para la gran cena. Entonces se acercó a Jesús y le dijo: —Maestro, ¿no te parece injusto que mi hermana esté aquí sentada mientras yo hago todo el trabajo? Dile que venga a ayudarme. Biblia Católica (Latinoamericana) Mientras tanto Marta estaba absorbida por los muchos quehaceres de la casa. En cierto momento Marta se acercó a Jesús y le dijo: 'Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para atender? Dile que me ayude. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Marta estaba atareada° con respecto a mucho servicio; y parándose, dijo: Señor: ¿No te importa que mi hermana me dejó sola para servir? Dile pues que me ayude. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Marta, entre tanto, andaba atareada con los muchos quehaceres. Por fin, se paró y dijo: 'Señor, ¿es que no te importa que mi hermana me deje sola con todo el trajín de la casa? Dile que venga a echarme una mano'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero Marta se distraía en muchos servicios; y vino a Él, diciendo: Señor, ¿no tienes cuidado que mi hermana me deja servir sola? Dile, pues, que me ayude. |
Llegada la tarde, se le acercaron los disc pulos y le dijeron: 'Esto es un despoblado, y la hora está avanzada; despide, pues, a la gente, que vayan a las aldeas a comprarse alimentos'.
Pedro, llevándoselo aparte, se puso a reprenderlo, diciéndole: '¡Dios te libre, Se or! No te sucederá tal cosa'.
Cuando lo oyeron los de su familia, fueron con ánimo de tomarlo bajo su custodia, pues se dec a: 'Está fuera de s '.
Siguiendo ellos su camino, entró Jesús en cierta aldea; y una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa.
Pero el Se or le contestó: 'Marta, Marta, te afanas y te agitas por muchas cosas;
Por tanto, no andéis buscando qué habéis de comer y de beber; no os inquietéis por eso.
Hab a un enfermo, llamado Lázaro, de Betania, la aldea de Mar a y de su hermana Marta.
All le prepararon una cena: Marta serv a, y Lázaro era uno de los que estaba a la mesa con él.
No trabajéis por conseguir el alimento perecedero, sino el que permanece para vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre, porque éste es el que el Padre, Dios, ha marcado con su sello'.