Por haberme obedecido tú, todas las naciones de la tierra serán bendecidas en tu descendencia'.
Lucas 1:42 - Biblia Castilian 2003 y exclamó a voz en grito: '¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. Biblia Nueva Traducción Viviente Elisabet dio un grito de alegría y le exclamó a María: —Dios te ha bendecido más que a todas las mujeres, y tu hijo es bendito. Biblia Católica (Latinoamericana) y exclamó en alta voz: '¡Bendita tú eres entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!' La Biblia Textual 3a Edicion Y exclamó a gran voz, y dijo: ¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! Biblia Serafín de Ausejo 1975 y exclamó a voz en grito: '¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! Biblia Reina Valera Gómez (2023) y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. |
Por haberme obedecido tú, todas las naciones de la tierra serán bendecidas en tu descendencia'.
Elevado es su honor con tu socorro, tú pones sobre él esplendor y majestad.
Me brota del corazón un bello canto, voy a recitar poemas para el rey, mi lengua es la ágil pluma de un escriba.
Y entrando el ángel a donde ella estaba, la saludó: '¡Salve, plena de gracia! El Se or está contigo'.
Apenas oyó Isabel el saludo de Mar a, el ni o saltó de gozo en su seno, ella quedó llena de esp ritu santo
porque puso sus ojos en la humilde condición de su esclava. Y as, desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada,
y exclamaban: '¡Bendito el que viene, el rey, en el nombre del Se or! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!'.
a ellos pertenecen los patriarcas, y de ellos procede, según la carne, Cristo; el cual está por encima de todo, Dios bendito para siempre. Amén.
fija nuestra mirada en el jefe iniciador y consumador de la fe: Jesús. El cual, a la vista de la dicha que se le presentaba, soportó la cruz, sin tomar en cuenta la ignominia, y está sentado a la diestra del trono de Dios.
¡Bendita entre las mujeres Yael, esposa de Jéber, el quenita! ¡Entre las mujeres que moran en tiendas, bendita sea ella!