Quiero lavar mis manos en pureza y dar vueltas, Se or, en torno a tus altares,
Levítico 8:6 - Biblia Castilian 2003 Entonces mandó Moisés que se acercaran Aarón y sus hijos y los lavó con agua. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces Moisés hizo acercarse a Aarón y a sus hijos, y los lavó con agua. Biblia Nueva Traducción Viviente Después presentó a Aarón y a sus hijos y los lavó con agua. Biblia Católica (Latinoamericana) Moisés, entonces, pidió que Aarón y sus hijos se acercaran, y los lavó con agua. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Moisés hizo que Aarón y sus hijos se acercaran y los lavó con agua. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces mandó Moisés que se acercaran Aarón y sus hijos y los lavó con agua. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Moisés hizo llegar a Aarón y a sus hijos, y los lavó con agua. |
Quiero lavar mis manos en pureza y dar vueltas, Se or, en torno a tus altares,
Cuando, después que se hubo unido a Betsabé, vino a su encuentro el profeta Natán.
Después harás que Aarón y sus hijos se acerquen a la entrada de la tienda del encuentro y los lavarás con agua.
Cuando entren en la tienda del encuentro se lavarán con este agua y no morirán. Del mismo modo, cuando se llegaren al altar para oficiar, para quemar un sacrificio por el fuego a Yahveh,
Harás avanzar a Aarón y sus hijos hacia la entrada de la tienda del encuentro y los lavarás con agua.
lavaos, purificaos, apartad vuestras malas acciones de delante de mis ojos; cesad de obrar el mal,
'Os rociaré con agua limpia y quedaréis limpios; os limpiaré de todas vuestras manchas y de todos vuestros dolos.
Vestirá la túnica sagrada de lino, llevará calzones de lino, se ce irá un cinturón de lino y se cubrirá con un turbante también de lino. Éstas son las vestiduras sagradas con que se vestirá después de haberse lavado.
'Aquel d a habrá una fuente abierta para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén contra el pecado y la impureza.
Y esto erais algunos; pero fuisteis lavados, fuisteis consagrados a Dios pero fuisteis justificados en el nombre del Se or Jesucristo y en el Esp ritu de nuestro Dios.
Acerquémonos, pues, con corazón sincero y fe plena, purificado el corazón de toda impureza de conciencia y lavado el cuerpo con agua pura.
pues todo se reduce a alimentos, bebidas y diversas abluciones, o sea, a observancias extr nsecas, vigentes hasta el tiempo de la institución correcta.
Yo le respond: 'Se or m o, tú lo sabes'. Él me dijo: 'Éstos son los que vienen de la gran tribulación, han lavado sus vestidos y los han blanqueado en la sangre del Cordero.