Hombres santos seréis para m. No comerás la carne de un animal destrozado en el campo por una fiera; se la echaréis a los perros.
Levítico 7:24 - Biblia Castilian 2003 La grasa de un animal muerto o despedazado podrá utilizarse para cualquier otro uso, pero no la comeréis. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 La grosura de animal muerto, y la grosura del que fue despedazado por fieras, se dispondrá para cualquier otro uso, mas no la comeréis. Biblia Nueva Traducción Viviente Nunca deberás comer la grasa de un animal encontrado muerto o despedazado por animales salvajes, aunque puede usarse para cualquier otro propósito. Biblia Católica (Latinoamericana) La grasa de animal muerto o destrozado podrá servir para cualquier uso, pero no la comerán. La Biblia Textual 3a Edicion La grasa de animal muerto o la grasa de animal despedazado podrán servir para cualquier uso, pero ciertamente no la comeréis. Biblia Serafín de Ausejo 1975 La grasa de un animal muerto o despedazado podrá utilizarse para cualquier otro uso, pero no la comeréis. Biblia Reina Valera Gómez (2023) La grosura de animal muerto, y la grosura del que fue despedazado por fieras podrá servir para cualquier otro uso, pero no lo comeréis. |
Hombres santos seréis para m. No comerás la carne de un animal destrozado en el campo por una fiera; se la echaréis a los perros.
Yo entonces exclamé: '¡Ay, Se or Yahveh! Mira que yo nunca me he contaminado; y desde mi infancia hasta ahora no he comido animal muerto o despedazado, ni ha entrado en mi boca carne impura'.
Los sacerdotes no comerán nada, tanto de aves como de cualquier otro animal que haya muerto de muerte natural o haya sido despedazado.'
Cualquiera, nativo o extranjero, que coma de un animal muerto o despedazado, lavará sus vestidos, se ba ará y será impuro hasta la tarde; después será puro.
No comerá carne de animal muerto o despedazado, pues se contaminar a con ella. Yo, Yahveh.
Porque todo el que coma de la grasa de un animal que puede ofrecerse a Yahveh como manjar pasado por el fuego será extirpado de su pueblo.
Pero no comeréis ninguna bestia muerta; se la darás a los forasteros que viven en tus ciudades o se la venderás a los extranjeros. Porque tú eres un pueblo consagrado a Yahveh, tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre.