esto dice Yahveh, Dios de Israel: 'Yo traeré sobre este lugar y sobre sus habitantes la desventura, es decir, todas las maldiciones escritas en el libro que han sido le das en presencia del rey de Judá.
Levítico 26:39 - Biblia Castilian 2003 Los que de vosotros sobrevivan todav a se pudrirán en el pa s de sus enemigos; a causa de su iniquidad y de la iniquidad de sus padres, se pudrirán. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y los que queden de vosotros decaerán en las tierras de vuestros enemigos por su iniquidad; y por la iniquidad de sus padres decaerán con ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente Aquellos de ustedes que sobrevivan se consumirán en las tierras de sus enemigos a causa de sus pecados y de los pecados de sus antepasados. Biblia Católica (Latinoamericana) Los que de ustedes sobrevivan se pudrirán en país enemigo por causa de su maldad y por las maldades de sus padres unidas que se les pegaron. La Biblia Textual 3a Edicion Y los que queden de vosotros, desfallecerán en su iniquidad en las tierras de vuestros enemigos, y también a causa de las iniquidades de sus antepasados se consumirán juntamente con ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los que de vosotros sobrevivan todavía se pudrirán en el país de sus enemigos; a causa de su iniquidad y de la iniquidad de sus padres, se pudrirán. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los que quedaren de vosotros decaerán en las tierras de vuestros enemigos por su iniquidad; y por la iniquidad de sus padres decaerán con ellos. |
esto dice Yahveh, Dios de Israel: 'Yo traeré sobre este lugar y sobre sus habitantes la desventura, es decir, todas las maldiciones escritas en el libro que han sido le das en presencia del rey de Judá.
Desde los d as de nuestros padres hasta hoy hemos cometido muy graves faltas; y por nuestras iniquidades, nosotros, nuestros reyes y nuestros sacerdotes fuimos entregados al poder de los reyes de otras naciones, a la espada, al cautiverio, al saqueo y a la afrenta que cubre nuestro rostro, como en este d a.
pero, si os convert s a m, guardáis mis mandamientos y los ponéis por obra, aun cuando vuestros desterrados estuvieran en el extremo del cielo, de all los reuniré y los traeré al lugar que eleg para morada de mi nombre'.
No te postrarás ante ellas, ni las servirás; porque yo, Yahveh, tu Dios, soy un Dios celoso que castigo en los hijos la falta de los padres hasta la tercera y cuarta generación de aquellos que me odian,
que guarda su benevolencia por mil generaciones, que tolera culpas, transgresiones y pecados, pero que no deja nada impune y castiga la falta de los padres en los hijos, y en los hijos de los hijos hasta la tercera y cuarta generación'.
Preparad la hecatombe para sus hijos por la iniquidad de sus padres: que no se levanten a conquistar la tierra y a llenar de ruinas el orbe.
Desde los confines de la tierra escuchamos canciones: ¡Honor al justo! Yo digo: '¡Malhadado de m ! ¡Malhadado de m ! ¡Ay de m ! Los traidores traicionan, traman traición los traidores'.
Acostémonos sobre nuestra vergüenza, y nuestra ignominia nos cubra; pues contra Yahveh, nuestro Dios, hemos pecado, nosotros y nuestros padres, desde nuestra juventud hasta hoy, y no hemos escuchado la voz de Yahveh, nuestro Dios.
En aquellos d as no se dirá más: los padres comen agraces, y los dientes de los hijos sufren la dentera.
Desterrada está Judá, en aflicción Gu mel y dura servidumbre; dispersa entre las naciones, no encuentra reposo. Le dieron alcance sus perseguidores, la cercaron de angustias.
Más dichosos fueron los muertos a espada Tet que los muertos de hambre, que se consumen extenuados, por falta de alimento.
'Vosotros dec s: '¿Por qué no carga el hijo con la culpa del padre?'; porque el hijo ha practicado el derecho y la justicia, ha guardado todas mis leyes y las ha cumplido, por eso vivirá.
All recordaréis vuestra conducta y todas vuestras acciones con las que os habéis contaminado, y os sentiréis asqueados de vosotros mismos por todas las maldades que cometisteis.
Llevaréis turbantes en la cabeza y sandalias en los pies; no os lamentaréis ni lloraréis, pero os consumiréis por vuestras iniquidades y gemiréis los unos con los otros.
'Tú, pues, hijo de hombre, di a la casa de Israel: vosotros estáis diciendo lo siguiente: 'Nuestras transgresiones y nuestros pecados pesan tanto sobre nosotros que nos estamos consumiendo. ¿Cómo podremos vivir?'.
Recordaréis entonces vuestra mala conducta y vuestras obras, que no eran buenas, y sentiréis hast o de vosotros mismos por vuestras iniquidades y por vuestras abominaciones.
para que, careciendo de pan y de agua, languidezcan los unos y los otros y perezcan por su iniquidad'.
entonces vuestros evadidos se acordarán de m en medio de las naciones adonde habrán sido deportados, después que yo haya quebrantado el corazón que se prostituyó apartándose de m y los ojos que se prostituyeron yendo tras sus dolos; y se sentirán asqueados de s mismos por las maldades que cometieron con tantas abominaciones.
Voy a volverme a mi lugar, hasta que exp en su culpa y busquen mi rostro; en su angustia me buscarán ansiosamente.
Yo los diseminé entre los pueblos, pero en lejanas tierras se acordarán de m; criarán a sus hijos y volverán a casa.
'Yahveh es tardo a la ira y rico en misericordia; soporta la falta y la transgresión, aunque no la deja impune, sino que castiga la falta de los padres en los hijos hasta la tercera y cuarta generación'.
Entre esas naciones no tendrás sosiego ni hallarás lugar donde posar la planta de tu pie. All te dará Yahveh un corazón trémulo, ojos desalentados y congoja de esp ritu.
'Cuando te sobrevengan todas estas cosas, las bendiciones y las maldiciones que yo te he presentado, si las traes a la memoria, en medio de todas las naciones a las que Yahveh, tu Dios, te haya arrojado,
No te postrarás ante ellas ni las servirás, porque yo, Yahveh, tu Dios, soy un Dios celoso, que castigo en los hijos la falta de los padres hasta la tercera y cuarta generación de aquellos que me odian;
Como las naciones que Yahveh ha ido aniquilando a tu paso, as pereceréis vosotros, por no haber escuchado la voz de Yahveh, vuestro Dios.