David le dijo: 'Caiga tu sangre sobre tu cabeza, pues tu boca testificó contra ti cuando dijiste: 'Yo he dado muerte al ungido de Yahveh''.
Levítico 20:9 - Biblia Castilian 2003 Quien maldijere a su padre o a su madre morirá sin remisión. Por haber maldecido a su padre y a su madre su sangre caerá sobre él. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Todo hombre que maldijere a su padre o a su madre, de cierto morirá; a su padre o a su madre maldijo; su sangre será sobre él. Biblia Nueva Traducción Viviente »Cualquiera que deshonre a su padre o a su madre será ejecutado. Esa persona es culpable de un delito de muerte. Biblia Católica (Latinoamericana) Cualquiera que maldiga a su padre o a su madre morirá. El que maldice a su padre o a su madre, quiere su propia muerte. La Biblia Textual 3a Edicion Cualquier hombre que maldiga a su padre o a su madre, será muerto irremisiblemente.° Ha maldecido a su padre o a su madre. En él recae su propia sangre.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Quien maldijere a su padre o a su madre morirá sin remisión. Por haber maldecido a su padre y a su madre su sangre caerá sobre él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque cualquiera que maldijere a su padre o a su madre, de cierto morirá; a su padre o a su madre maldijo; su sangre será sobre él. |
David le dijo: 'Caiga tu sangre sobre tu cabeza, pues tu boca testificó contra ti cuando dijiste: 'Yo he dado muerte al ungido de Yahveh''.
Yahveh hará recaer su sangre sobre su propia cabeza, porque mató a dos hombres más justos y mejores que él, a los que asesinó con la espada sin saberlo mi padre David: a Abner, hijo de Ner, jefe del ejército de Israel, y a Amasá, hijo de Yéter, jefe del ejército de Judá.
Quien desprecia al padre y a la madre, verá morir su lámpara en densas tinieblas.
Al hijo que se burla de su padre y desprecia la vejez de su madre, los cuervos le sacarán los ojos, lo devorarán los aguiluchos.
presta a interés y cobra usura, ¿vivirá acaso? ¡No vivirá! Por haber cometido todas estas abominaciones, ciertamente morirá; su sangre recaerá sobre él.'
En ti se desprecia al padre y a la madre, en medio de ti se hace violencia al forastero, en ti se oprime al huérfano y a la viuda.
Si una mujer se acerca a cualquier bestia para unirse con ella, matarás a la mujer y a la bestia; morirán sin remisión. Su sangre caerá sobre ellas.
El hombre o la mujer que practiquen la nigromancia o la adivinación morirán sin remisión. Serán lapidados y su sangre caerá sobre ellos'.
Porque Dios mandó: Honra al padre y a la madre; y también: Quien maldijere al padre o a la madre, morirá sin remisión.
Y todo el pueblo respondió: '¡Caiga su sangre sobre nosotros y sobre nuestros hijos!'.
Pues Moisés mandó: Honra a tu padre y a tu madre; y también: Quien maldiga a su padre o a su madre morirá sin remisión.
Maldito el que desprecie a su padre o a su madre. Y todo el pueblo dirá: Amén.
Todo el que saliere de las puertas de tu casa será responsable de su sangre, y nosotros seremos inocentes. Pero del que permanezca contigo en tu casa responderemos con nuestras cabezas si la mano de alguien lo toca.
Se devolv a as la violencia hecha a los setenta hijos de Yerubaal y se hac a recaer la sangre de éstos sobre Abimélec, su hermano, que los hab a asesinado, y sobre los principales de Siquén, que le hab an ayudado a matar a sus hermanos.