¡Os lleváis la copa en la que bebe mi se or y de la que se sirve para adivinar! Os habéis comportado muy mal''.
Levítico 19:26 - Biblia Castilian 2003 No comeréis nada con sangre. No practicaréis la adivinación. No ejerceréis la magia. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 No comeréis cosa alguna con sangre. No seréis agoreros, ni adivinos. Biblia Nueva Traducción Viviente »No comas carne sin primero escurrirle la sangre. »No practiques la adivinación ni la brujería. Biblia Católica (Latinoamericana) No coman nada encima de la sangre. No practiquen la hechicería ni la astrología. La Biblia Textual 3a Edicion Nada con sangre comeréis.° No practicaréis adivinación ni astrología.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 No comeréis nada con sangre. No practicaréis la adivinación. No ejerceréis la magia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) No comeréis cosa alguna con sangre. No seréis agoreros, ni adivinaréis. |
¡Os lleváis la copa en la que bebe mi se or y de la que se sirve para adivinar! Os habéis comportado muy mal''.
Incluso hicieron pasar a sus hijos y a sus hijas por el fuego, practicaron la adivinación y la hechicer a y se entregaron a hacer lo que es malo a los ojos de Yahveh, con lo que provocaron su cólera.
Incluso hizo pasar por el fuego a su propio hijo, creyó en los presagios y los encantamientos y consultó a nigromantes y adivinos. Hizo, en fin, de muchas maneras todo lo que es malo a los ojos de Yahveh, provocando as su ira.
Incluso hizo pasar por el fuego a sus propios hijos en el valle de Ben Hinón, creyó en los presagios, los encantamientos y la magia y consultó a nigromantes y adivinos. Hizo, en fin, de muchas maneras todo lo que es malo a los ojos de Yahveh, provocando as su ira.
Entonces el Faraón convocó también a los sabios y encantadores, y también ellos, los magos de Egipto, hicieron otro tanto con sus artes mágicas.
las ranas se alejarán de ti, de tus casas, de tus servidores y de tu pueblo y sólo quedarán en el Nilo'.
As dice Yahveh: 'No aprendáis el camino de las naciones, ni temáis las se ales del cielo, aunque las naciones las teman.
Los caldeos respondieron al rey: 'No hay nadie en el mundo que pueda resolver lo que pretende el rey. Por eso, ningún rey, por grande y poderoso que fuera, preguntó jamás cosa semejante a ningún mago, adivino o caldeo.
El quinto a o podréis comer los frutos y se acrecentará el rendimiento en beneficio vuestro. Yo, Yahveh, vuestro Dios.
Ésta es una ley perpetua para vuestras generaciones dondequiera que habitéis: no comeréis ni grasa ni sangre.'
Donde quiera que moréis, no comeréis sangre alguna, sea de aves o de ganados.
Me llegaré a vosotros para el juicio y seré un testigo irrefutable contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran en falso, contra los que defraudan el jornal del jornalero, avasallan a la viuda y al huérfano y oprimen al forastero mostrando as que no me temen - dice Yahveh Sebaot -.
sino escribirles que se abstengan de las contaminaciones de los dolos, de la fornicación, de lo estrangulado y de la sangre.
Pero nunca podréis comer la sangre; la derramarás sobre la tierra como el agua.
Pero en ningún caso comerás la sangre, porque la sangre es la vida, y no debes comer la vida con la carne.
Por ello la tropa se precipitó sobre el bot n, se apoderó de ovejas, bueyes y becerros, los degolló en el suelo y se los comieron con la sangre.
Pasaron aviso a Saúl: 'La tropa está pecando contra Yahveh por comer carne con sangre'. Él dijo entonces: 'Habéis prevaricado. Haced rodar hacia m ahora una piedra grande'.
Pues la rebeld a es como pecado de hechicer a, y la contumacia como delito de idolatr a. Porque tú has rechazado la palabra de Yahveh, él también te rechaza para que ya no seas rey'.