Respondió Abrán al rey de Sodoma: 'Alzo mi mano a Yahveh, Dios Alt simo, creador del cielo y de la tierra,
Jueces 5:19 - Biblia Castilian 2003 Llegaron los reyes, combatieron, entonces combatieron los reyes de Canaán en Taanac, junto a las aguas de Meguidó, sin poder recoger bot n de plata. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Vinieron reyes y pelearon; Entonces pelearon los reyes de Canaán, En Taanac, junto a las aguas de Meguido, Mas no llevaron ganancia alguna de dinero. Biblia Nueva Traducción Viviente »Los reyes de Canaán llegaron y pelearon en Taanac, cerca de los manantiales de Meguido, pero no se llevaron tesoros de plata. Biblia Católica (Latinoamericana) Llegaron los reyes y combatieron. En Tanac, cerca de las aguas de Meguido, combatieron los reyes de Canaán, pero no recogieron botín. La Biblia Textual 3a Edicion Los reyes vinieron y guerrearon, Guerrearon los reyes de Canaán; En Taanac, junto a las aguas de Meguido; Pero no tomaron despojos de plata, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Llegaron los reyes, combatieron, entonces combatieron los reyes de Canaán en Taanac, junto a las aguas de Meguidó, sin poder recoger botín de plata. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Vinieron reyes y pelearon; entonces pelearon los reyes de Canaán en Taanac, junto a las aguas de Meguido, mas no llevaron ganancia alguna de dinero. |
Respondió Abrán al rey de Sodoma: 'Alzo mi mano a Yahveh, Dios Alt simo, creador del cielo y de la tierra,
Abandonó Ca n la presencia de Yahveh, y se estableció en el pa s de Nod, al oriente de Edén.
Baaná, hijo de Ajilud, ten a Taanac, Meguidó y hasta más allá de Yocmeán, y todo Betsán, por debajo de Yizreel, desde Betsán hasta Abel Mejolá, que está junto a Sartán;
En su tiempo subió el Faraón Necó, rey de Egipto, en ayuda del rey de Asiria, hacia el r o Éufrates. Salió el rey Jos as a su encuentro, pero apenas se enfrentaron, el Faraón le dio muerte en Meguidó.
Pero Jos as no quiso apartarse, sino que se disfrazó para combatir contra él. No hizo caso de las palabras de Necó, a pesar de que proced an de la boca de Dios, sino que fue a presentarle batalla en el valle de Meguido.
A Manasés le pertenec a, en el territorio de Isacar y de Aser: Betsán con sus filiales, Yibleán con sus filiales, los habitantes de Dor con sus filiales, los habitantes de Taanac con sus filiales y los habitantes de Meguidó con sus filiales: la tercera parte de Néfet.
Vi entonces a la bestia y a los reyes de la tierra con sus ejércitos, congregados para hacer la guerra contra el jinete y contra su ejército.
Tampoco Manasés logró conquistar Betsán y sus aldeas, ni Taanac y sus aldeas, ni a los habitantes de Dor, de Yibleán, de Meguidó y de sus respectivas aldeas, pues los cananeos consiguieron permanecer en esta región.
S sara reunió todos sus carros, novecientos carros de hierro, y todo su ejército, desde Jaróset Hagoin hasta el torrente Quisón.
¿No será que hallaron bot n y lo están repartiendo? ¡Una doncella, dos doncellas por cada valiente; telas de colores son el bot n de S sara, son el bot n telas de colores; un manto, dos mantos de color para el cuello es el bot n!