Muchas veces los libró, mas ellos, obstinados en sus miras, se hundieron más y más en la maldad.
Jueces 16:14 - Biblia Castilian 2003 y las fijaras con una clavija de tejedor, yo me quedar a sin fuerzas y ser a como un hombre cualquiera'. Entonces ella consiguió que se durmiera; le tejió las siete trenzas de la cabellera con un hilo fuerte y las fijó con una clavija de tejedor. Luego le gritó: '¡Sobre ti los filisteos, Sansón!'. Él se despertó al punto de su sue o y arrancó el tejido, la clavija y el telar. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y ella las aseguró con la estaca, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Mas despertando él de su sueño, arrancó la estaca del telar con la tela. Biblia Nueva Traducción Viviente Después lo aseguró con la lanzadera del telar. Una vez más gritó: «¡Sansón! ¡Los filisteos han venido a capturarte!»; pero Sansón se despertó, arrancó la lanzadera del telar y sacó de un tirón su cabello del telar y de la tela. Biblia Católica (Latinoamericana) Ella lo durmió, entretejió las siete trenzas de su cabellera con la urdimbre de un telar, las apretó con un peine de tejedor y le dijo: '¡Sansón, los filisteos te atacan!' Se despertó de su sueño y arrancó el peine, la lanzadera y la urdimbre. La Biblia Textual 3a Edicion Ella pues las aseguró con la estaca, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos te acometen! Y él, despertando de su sueño, arrancó la estaca del telar juntamente con los lizos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y las fijaras con una clavija de tejedor, yo me quedaría sin fuerzas y sería como un hombre cualquiera'. Entonces ella consiguió que se durmiera; le tejió las siete trenzas de la cabellera con un hilo fuerte y las fijó con una clavija de tejedor. Luego le gritó: '¡Sobre ti los filisteos, Sansón!'. Él se despertó al punto de su sueño y arrancó el tejido, la clavija y el telar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ella hincó la estaca, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Mas despertando él de su sueño, arrancó la estaca del telar con la tela. |
Muchas veces los libró, mas ellos, obstinados en sus miras, se hundieron más y más en la maldad.
Dijo entonces Dalila a Sansón: 'Hasta aqu te has burlado de m, y sólo me has dicho mentiras. Por favor, d me ya cómo habr a que atarte'. Él respondió: 'Si entretejieras las siete trenzas de mi cabellera con hilo fuerte de tejer
Ella le dijo entonces: '¿Cómo puedes decir 'te amo', si tu corazón no está conmigo? Es la tercera vez que te has burlado de m, pues todav a no me has declarado cuál es el secreto de tu gran fuerza'.