Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Jueces 16:12 - Biblia Castilian 2003

Tomó entonces Dalila cuerdas nuevas, lo ató con ellas y gritó: '¡Sobre ti los filisteos, Sansón!'. Hab a en la alcoba hombres apostados en acecho. Pero él rompió las cuerdas de sus brazos como un hilo.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Y Dalila tomó cuerdas nuevas, y le ató con ellas, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Y los espías estaban en el aposento. Mas él las rompió de sus brazos como un hilo.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

Así que Dalila tomó sogas nuevas y ató a Sansón con ellas. Los hombres estaban escondidos en otra habitación como antes, y de nuevo Dalila gritó: «¡Sansón! ¡Los filisteos han venido a capturarte!»; pero otra vez Sansón rompió las sogas que le ataban los brazos como si fueran hilos.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Dalila lo amarró con cuerdas nuevas; luego dijo: '¡Sansón, los filisteos te atacan!' Le habían preparado una emboscada en su pieza, pero él rompió las cuerdas como si fueran hilo.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Y Dalila tomó sogas nuevas y lo ató con ellas, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos te acometen! (y los hombres permanecían al acecho en el aposento interior). Pero él rompió las sogas de sus brazos como un hilo.

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Tomó entonces Dalila cuerdas nuevas, lo ató con ellas y gritó: '¡Sobre ti los filisteos, Sansón!'. Había en la alcoba hombres apostados en acecho. Pero él rompió las cuerdas de sus brazos como un hilo.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y Dalila tomó cuerdas nuevas, y le ató con ellas, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Y los espías estaban en una cámara. Mas él las rompió de sus brazos como un hilo.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Jueces 16:12
4 Referans Kwoze  

Se acercó entonces el tribuno y, apoderándose de él, mandó sujetarle con dos cadenas, al tiempo que trataba de averiguar quién era y qué hab a hecho.


Cuando llegaba a Lej, los filisteos salieron gritando a su encuentro, pero entonces lo invadió el esp ritu de Yahveh y los cordeles con que ten a atados los brazos fueron como hilos de lino consumidos por el fuego, de modo que las ligaduras se deshicieron entre sus manos.


Él respondió: 'Si me ataran bien con cuerdas nuevas que no hubieran sido empleadas para otro uso, quedar a sin fuerzas y ser a como un hombre cualquiera'.


Dijo entonces Dalila a Sansón: 'Hasta aqu te has burlado de m, y sólo me has dicho mentiras. Por favor, d me ya cómo habr a que atarte'. Él respondió: 'Si entretejieras las siete trenzas de mi cabellera con hilo fuerte de tejer