Jueces 1:16 - Biblia Castilian 2003 Los hijos de Jobab, el quenita, suegro de Moisés, subieron con los hijos de Judá desde la ciudad de las Palmeras al desierto que está al sur de Arad, y fueron a habitar con los amalecitas. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y los hijos del ceneo, suegro de Moisés, subieron de la ciudad de las palmeras con los hijos de Judá al desierto de Judá, que está en el Neguev cerca de Arad; y fueron y habitaron con el pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los miembros de la tribu de Judá salieron de Jericó —la ciudad de las palmeras—, los ceneos (que eran descendientes del suegro de Moisés) los acompañaron al desierto de Judá y se establecieron entre la gente del lugar, cerca de la ciudad de Arad, en el Neguev. Biblia Católica (Latinoamericana) Los hijos de Hobab el quenita, cuñado de Moisés, subieron con los hijos de Judá, desde la Ciudad de las Palmeras hasta el desierto de Judá, al sur de Arad. Allí se establecieron en medio del pueblo de Israel. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces los hijos del ceneo, suegro de Moisés, subieron juntamente con los hijos de Judá, de la ciudad de las Palmas al desierto de Judá, que está al sur de Arad. Y así fueron y habitaron con el pueblo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los hijos de Jobab, el quenita, suegro de Moisés, subieron con los hijos de Judá desde la ciudad de las Palmeras al desierto que está al sur de Arad, y fueron a habitar con los amalecitas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los hijos del cineo, suegro de Moisés, subieron de la ciudad de las palmeras con los hijos de Judá, al desierto de Judá que está al sur de Arad; y fueron y habitaron con el pueblo. |
Fueron clanes de los sofr es que moraban en Yabés los tirat es, los simat es, los sucat es. Éstos son los quinitas, que proceden de Jamat, padre de la casa de Recab.
Por aquel tiempo envió el rey Ajaz a pedir auxilio a los reyes de Asiria;
Yetró, sacerdote de Madián, suegro de Moisés, oyó todo lo que hab a hecho Dios en favor de Moisés y de Israel, su pueblo, cuando Yahveh hizo salir a Israel de Egipto.
Después Yetró, suegro de Moisés, ofreció un holocausto y sacrificios a Dios. Vino Aarón, y con él todos los ancianos de Israel, para tomar parte en la comida con el suegro de Moisés en presencia de Dios.
Salió Moisés al encuentro de su suegro, se postró, le besó, y después de los saludos, entraron en la tienda.
Apacentaba Moisés el reba o de Yetró, su suegro, sacerdote de Madián. Trashumando con el reba o por el desierto, llegó hasta la monta a de Dios, Horeb.
Volvió Moisés a casa de su suegro Yetró y le dijo: 'Perm teme que vuelva a mis hermanos de Egipto, para ver si todav a viven'. Respondió Yetró a Moisés: 'Vete en paz'.
'Vete a la comunidad de los recabitas, habla con ellos, llévalos a una de las salas del templo de Yahveh y dales a beber vino'.
Cuando el cananeo rey de Arad, que ocupaba el Negueb, oyó que los israelitas avanzaban por el camino de Atar n atacó a Israel y le hizo algunos prisioneros.
Por aquellos d as se presentó en el desierto de Judea Juan el Bautista proclamando:
el Negueb y la comarca del valle de Jericó, la ciudad de las palmeras, hasta Soar.
Y Yahveh le dijo: 'Ah tienes la tierra que bajo juramento promet a Abrahán, a Isaac y a Jacob, diciéndoles: 'A tu descendencia se la daré'. Te la hago ver con tus ojos, pero no entrarás en ella'.
Las ciudades de la tribu de los hijos de Benjam n, según sus clanes, fueron: Jericó, Bet Joglá, Émec Ques s,
Ella le replicó: 'Concédeme un favor: ya que me has dado tierra en el Negueb, dame también fuentes de agua'. Y Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo.
Congregó Eglón en torno suyo a los amonitas y los amalecitas y partió contra Israel, lo derrotó y conquistó la ciudad de las Palmeras.
Jéber, el quenita, se hab a separado de Ca n, de los hijos de Jobab, suegro de Moisés, y hab a plantado su tienda junto al encinar de Saanan n, que está cerca de Cades.
S sara huyó a pie hacia la tienda de Yael, esposa de Jéber, el quenita, pues hab a paz entre Yabin, rey de Jasor y la casa de Jéber, el quenita.
Saúl dijo a los quenitas: 'Id, retiraos y salid de en medio de los amalecitas, no sea que os haga desaparecer con ellos; pues vosotros tratasteis bien a todos los israelitas cuando sub an de Egipto'. Los quenitas se apartaron de los amalecitas.
Preguntaba Aqu s: '¿Dónde habéis hecho hoy la incursión?'. Y respond a David: 'Hacia el Negueb de Judá, hacia el Negueb de los yerajmeelitas, hacia el Negueb de los quenitas'.
a los de Racal, a los de las ciudades de los yerajmeelitas, a los de las ciudades de los quenitas,