Le dijo entonces Eliseo: '¿No iba contigo mi esp ritu cuando un hombre bajó de su carro para ir a tu encuentro? Ahora has recibido dinero y has aceptado vestidos, y comprarás olivares, vi as, ovejas y vacas, siervos y siervas.
Juan 4:19 - Biblia Castilian 2003 Respóndele la mujer: 'Se or, estoy viendo que tú eres profeta. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Le dijo la mujer: Señor, me parece que tú eres profeta. Biblia Nueva Traducción Viviente —Señor —dijo la mujer—, seguro que usted es profeta. Biblia Católica (Latinoamericana) La mujer contestó: 'Señor, veo que eres profeta. La Biblia Textual 3a Edicion Le dice la mujer: Señor, estoy viendo que tú eres profeta. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respóndele la mujer: 'Señor, estoy viendo que tú eres profeta. Biblia Reina Valera Gómez (2023) La mujer le dijo: Señor, me parece que tú eres profeta. |
Le dijo entonces Eliseo: '¿No iba contigo mi esp ritu cuando un hombre bajó de su carro para ir a tu encuentro? Ahora has recibido dinero y has aceptado vestidos, y comprarás olivares, vi as, ovejas y vacas, siervos y siervas.
Respondió uno de sus servidores: 'No, mi se or el rey; es Eliseo, el profeta que hay en Israel, quien manifiesta al rey de Israel incluso las palabras que tú pronuncias en tu propia alcoba'.
Y la gente respond a: 'Éste es el profeta Jesús, el de Nazaret de Galilea'.
Él les contestó: '¿Qué?'. 'Lo de Jesús Nazareno - le respondieron ellos -, un hombre que fue profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y ante todo el pueblo;
Todos quedaron sobrecogidos de temor y glorificaban a Dios, diciendo: 'Un gran profeta ha surgido entre nosotros; Dios ha visitado a su pueblo'.
Viendo esto el fariseo que lo hab a invitado, se dec a para s: 'Si éste fuera [el] profeta, sabr a quién y qué clase de mujer es ésta que le está tocando: ¡es una pecadora!'.
Porque cinco maridos tuviste, y el que ahora tienes no es tu marido; en eso has dicho la verdad'.
'Venid a ver a un hombre que ha adivinado todo lo que he hecho. ¿No será el Cristo?'.
Cuando vieron los hombres la se al que Jesús hab a realizado, dec an: 'Éste es, sin duda, el profeta que iba a venir al mundo'.
Entre el pueblo, algunos que hab an o do estas palabras dec an: 'Éste es realmente el profeta'.
Nuevamente le preguntan al ciego: '¿Tú qué dices acerca de ese que te abrió los ojos?'. Él contestó: '¡Que es un profeta!'.
Yahveh, tu Dios, te suscitará de en medio de ti, de entre tus hermanos, un profeta como yo; a él escucharéis.