Informaron a Josué diciéndole: 'Han sido hallados los cinco reyes, escondidos en la cueva de Maquedá'.
Josué 8:23 - Biblia Castilian 2003 Al rey de Ay lo capturaron vivo y se lo presentaron a Josué. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero tomaron vivo al rey de Hai, y lo trajeron a Josué. Biblia Nueva Traducción Viviente Solo al rey de Hai lo capturaron vivo y lo llevaron ante Josué. Biblia Católica (Latinoamericana) Los israelitas capturaron vivo al rey de Aí y se lo llevaron a Josué. La Biblia Textual 3a Edicion Pero el rey de Hai fue capturado vivo y lo llevaron a Josué. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al rey de Ay lo capturaron vivo y se lo presentaron a Josué. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y tomaron vivo al rey de Hai, y le trajeron a Josué. |
Informaron a Josué diciéndole: 'Han sido hallados los cinco reyes, escondidos en la cueva de Maquedá'.
Ordenó entonces Josué: 'Abrid la boca de la cueva y sacadme fuera a esos cinco reyes'.
También los otros salieron de la ciudad a su encuentro, de modo que los de Ay quedaron rodeados por los israelitas, que atacaban unos por un lado y otros por otro. Fueron derrotados sin que quedaran supervivientes ni fugitivos.
Cuando Israel acabó de matar a todos los habitantes de Ay en la campi a, en el desierto, hasta donde éstos los hab an perseguido, y cuando todos hab an ca do a filo de espada hasta su total exterminio, se volvieron los israelitas hacia Ay y la pasaron también a filo de espada.
Al rey de Ay lo colgó de un árbol hasta el atardecer; pero a la puesta del sol mandó Josué que descolgaran del árbol el cadáver. Luego lo arrojaron a la entrada de la puerta de la ciudad y echaron sobre él un gran montón de piedras, que subsiste hasta el d a de hoy.
Cayó prisionera la bestia, y con ella el falso profeta, el que hac a a su servicio las se ales con las que extravió a los que recibieron la marca de la bestia y a cuantos adoraron su imagen. Ambos fueron arrojados vivos al lago de fuego que arde en azufre.
Apresó vivo a Agag, rey de Amalec, y pasó a filo de espada a todo el pueblo, en cumplimiento del anatema.